
Sunday, August 19, 2007
good morning baltimore

Sí, es pura alegría.
Tendría que haber salas sin butacas para bailar toda la función.
...but now I've tasted chocolate, and I'm never goin' back!
Friday, July 28, 2006
dragonflys
Santa Maria Da Feira
Pensando cada dia, cada hora
Pensando en ti
Caminando, mi cesta llena de moras
Son para ti
Temprano por la tarde y por la noche
Sueño de ti
Lalalala
(Devendra Banhart)
Pensando cada dia, cada hora
Pensando en ti
Caminando, mi cesta llena de moras
Son para ti
Temprano por la tarde y por la noche
Sueño de ti
Lalalala
(Devendra Banhart)
Tuesday, July 18, 2006
títulos
Sonidos de la sala de operaciones.
Un viejo obeso con frac camina arrastrando un pie haciendo un ruido particular, a rengo. Calza guantes de goma y se acerca a una muchacha muy bella tendida sobre algodones. Puede estar atada. Dibuja un corte. Toma un bisturí y lo hunde a la altura del corazón de la muchacha. Practica un gran tajo y aparece un mecanismo de relojería en vez de corazón, no hay sangre.
(Así empieza el guión de Pubis Angelical, de Manuel Puig).
Un viejo obeso con frac camina arrastrando un pie haciendo un ruido particular, a rengo. Calza guantes de goma y se acerca a una muchacha muy bella tendida sobre algodones. Puede estar atada. Dibuja un corte. Toma un bisturí y lo hunde a la altura del corazón de la muchacha. Practica un gran tajo y aparece un mecanismo de relojería en vez de corazón, no hay sangre.
(Así empieza el guión de Pubis Angelical, de Manuel Puig).
Wednesday, July 12, 2006
Isaac Davis
Why is life worth living? It's a very good question. Um... Well, There are certain things I guess that make it worthwhile. uh... Like what... okay... um... For me, uh... ooh... I would say... what, Groucho Marx, to name one thing... uh... um... and Wilie Mays... and um... the 2nd movement of the Jupiter Symphony... and um... Louis Armstrong, recording of Potato Head Blues... um... Swedish movies, naturally... Sentimental Education by Flaubert... uh... Marlon Brando, Frank Sinatra... um... those incredible Apples and Pears by Cezanne... uh... the crabs at Sam Wo's... uh... Tracy's face...
(Manhattan)
(Manhattan)
Wednesday, July 05, 2006
Harry Burns
I love that you get cold when it's 71 degrees out. I love that it takes you an hour and a half to order a sandwich. I love that you get a little crinkle above your nose when you're looking at me like I'm nuts. I love that after I spend the day with you, I can still smell your perfume on my clothes. And I love that you are the last person I want to talk to before I go to sleep at night. And it's not because I'm lonely, and it's not because it's New Year's Eve. I came here tonight because when you realize you want to spend the rest of your life with somebody, you want the rest of your life to start as soon as possible.
(When Harry Met Sally)
(When Harry Met Sally)
Thursday, April 27, 2006
la del collage

Tenía ardillitas de goma eva. En la guitarra. Y es como... el vórtice de toda la dulzura, cuando lo ves ahí cantando. Y me encontré con capitán intriga y marido, y los dos teníamos remeras con pajaritos.
Hoy le contaba a una amiga, y me dijo que voy a estar así embobado "un día y medio". Y tuve el siguiente pensamiento: re daría ser una nena judía de 12 años y pedirle a papá que contrate a Coiffeur para que cante en el bar mitzvá. Así de bobo.
Tuesday, April 25, 2006
fizz
Duelo de vedettes, pluma por doquier
ira a flor de piel
le clavo su taco aguja

bafici 2006
(Y lo hago ahora porque si no ya fue. Ok, ya re fue.)
Aún así, lo mejor:
Me and you and everyone we know
Linda linda linda
En ese orden.
Me gustaron tanto que casi no me importan los otros diez bodriazos que ví. Tanto así.
Flash, neon luces del centro
seducido, cae en la trampa
fiesta de farsantes
en la espuma social
invitame a pasar
chico dandy
(pero la versión de melero, obvio)
ira a flor de piel
le clavo su taco aguja

bafici 2006
(Y lo hago ahora porque si no ya fue. Ok, ya re fue.)
Aún así, lo mejor:
Me and you and everyone we know
Linda linda linda
En ese orden.
Me gustaron tanto que casi no me importan los otros diez bodriazos que ví. Tanto así.
Flash, neon luces del centro
seducido, cae en la trampa
fiesta de farsantes
en la espuma social
invitame a pasar
chico dandy
(pero la versión de melero, obvio)
Friday, March 24, 2006
heme
No habría ni geografía ni paisaje, al menos no uno mío.
Del dedo gordo del pie hasta la coronilla, y de las lágrimas a las cosquillas.
Haces mi vida brillar.
Hacíamos todas cosas chiquitas, y sin embargo ahí estaba todo. Caminabamos por Cramer derecho hasta el final, y llevábamos mate y un tapper con granola (eso era idea de él), y llegábamos a parque Saavedra, y nos tirábamos en el pasto. Y teníamos nuestro banco de plaza, uno solo, ese, porque cuando hablábamos ahí estabamos juntos. Y entonces tengo para mí la plaza más linda del mundo, en una geografía que nada más es mía. Y ahora soy ese banco de plaza más que ninguna otra cosa. Y también teníamos ese cassette, porque toda la sabiduría del mundo estaba en ese cassette, de un lado Aterciopelados y del otro tres temas de Juana Molina. Y sigue siendo así. Y todo lo que vino después tenía que estar de acuerdo con eso. Porque era inocente, y supongo que lo sabía; y estaba como en carne viva; y los dos éramos chicos, y nos tomabamos todo muy en serio. Así que un día, muerto de miedo, en el trabajo, con toda mi ingenuidad, lo invité al Podestá (era el año 98, y los jueves había que ir al Podestá porque tocaban bandas y era gratis, en Julián Alvarez y Soler; así que si me decía que no, al menos iba a quedar como alguien con onda), y funcionó. Y lo pasé a buscar por su casa, nunca había estado tan nervioso en mi vida, pero tenía que disimular que ya no tenía estómago, y que sabía lo que hacía. Y tenía mi pelo negro (teñido por mí mismo), y mi morral, y mi pin del tributo argentino a The Cure, edición limitada (que abre con EL cover de Jaime Sin Tierra de Plainsong). Y fuimos caminando, y esa noche tocaba Spleen, que a mi me encantaba, y me sabía las letras, y nos sentamos arriba a tomar algo, y yo pedí Martini Rosso, que ya era mi trago, y tener un trago estaba bien. Y entró ese chico, y yo lo miré y supongo que él también y me miró y me dijo: ibas a decir qué lindo chico? Y nos reímos. Y ya estaba todo dicho. Y después salimos y nos sentamos en un umbral (porque tenía que ser en un umbral, porque Buenos Aires es hermosa porque está llena de umbrales). Y el Primer beso. Y todo lo demás fue voltear los ojos y mirarme bien por dentro. Y estar juntos.
Por eso escucho Aterciopelados. Porque yo estoy ahí, y me siento y me reconozco ahí más que en ningún otro lado. En ese banco de plaza. Es como mi tour de rescate, por si me pierdo, o me confundo. Y son cosas todas chiquitas, que bien podrían haber pasado desapercibidas, y sin embargo si tuviese que reunirme a mí mismo, encontraría una colección de pequeñeces, todas los grandes hallazgos que tiene sentido celebrar.
Mira que tu tienes el candor a flor de piel y además siempre estás fresca como una lechuga.
Ser mariposa, morirme mañana.
Del dedo gordo del pie hasta la coronilla, y de las lágrimas a las cosquillas.
Haces mi vida brillar.
Hacíamos todas cosas chiquitas, y sin embargo ahí estaba todo. Caminabamos por Cramer derecho hasta el final, y llevábamos mate y un tapper con granola (eso era idea de él), y llegábamos a parque Saavedra, y nos tirábamos en el pasto. Y teníamos nuestro banco de plaza, uno solo, ese, porque cuando hablábamos ahí estabamos juntos. Y entonces tengo para mí la plaza más linda del mundo, en una geografía que nada más es mía. Y ahora soy ese banco de plaza más que ninguna otra cosa. Y también teníamos ese cassette, porque toda la sabiduría del mundo estaba en ese cassette, de un lado Aterciopelados y del otro tres temas de Juana Molina. Y sigue siendo así. Y todo lo que vino después tenía que estar de acuerdo con eso. Porque era inocente, y supongo que lo sabía; y estaba como en carne viva; y los dos éramos chicos, y nos tomabamos todo muy en serio. Así que un día, muerto de miedo, en el trabajo, con toda mi ingenuidad, lo invité al Podestá (era el año 98, y los jueves había que ir al Podestá porque tocaban bandas y era gratis, en Julián Alvarez y Soler; así que si me decía que no, al menos iba a quedar como alguien con onda), y funcionó. Y lo pasé a buscar por su casa, nunca había estado tan nervioso en mi vida, pero tenía que disimular que ya no tenía estómago, y que sabía lo que hacía. Y tenía mi pelo negro (teñido por mí mismo), y mi morral, y mi pin del tributo argentino a The Cure, edición limitada (que abre con EL cover de Jaime Sin Tierra de Plainsong). Y fuimos caminando, y esa noche tocaba Spleen, que a mi me encantaba, y me sabía las letras, y nos sentamos arriba a tomar algo, y yo pedí Martini Rosso, que ya era mi trago, y tener un trago estaba bien. Y entró ese chico, y yo lo miré y supongo que él también y me miró y me dijo: ibas a decir qué lindo chico? Y nos reímos. Y ya estaba todo dicho. Y después salimos y nos sentamos en un umbral (porque tenía que ser en un umbral, porque Buenos Aires es hermosa porque está llena de umbrales). Y el Primer beso. Y todo lo demás fue voltear los ojos y mirarme bien por dentro. Y estar juntos.
Por eso escucho Aterciopelados. Porque yo estoy ahí, y me siento y me reconozco ahí más que en ningún otro lado. En ese banco de plaza. Es como mi tour de rescate, por si me pierdo, o me confundo. Y son cosas todas chiquitas, que bien podrían haber pasado desapercibidas, y sin embargo si tuviese que reunirme a mí mismo, encontraría una colección de pequeñeces, todas los grandes hallazgos que tiene sentido celebrar.
Mira que tu tienes el candor a flor de piel y además siempre estás fresca como una lechuga.
Ser mariposa, morirme mañana.
Sunday, March 19, 2006
why?
Because those are the rules.

El mío se llama Running. Y el de L se llama Ennis.
(I wish I knew how to quit you!).
(Sí, vienen en la cajitamágica de Burger y están buenísimos).
Y Thumbsucker me encantó. Me pregunto si ahora mismo habrá un ejercito de zombies en Palermo chupándose el pulgar... Sospecho que sí.

El mío se llama Running. Y el de L se llama Ennis.
(I wish I knew how to quit you!).
(Sí, vienen en la cajitamágica de Burger y están buenísimos).
Y Thumbsucker me encantó. Me pregunto si ahora mismo habrá un ejercito de zombies en Palermo chupándose el pulgar... Sospecho que sí.
Saturday, March 18, 2006
yuki

Sentimental Journey
Este video es perfecto. Brillante. Y la canción también. Y ella también. Mal.
Se puede ver en YouTube (clic!, lo mejor es dejarlo bajando y verlo después todo seguido).
O se puede bajar de acá.
Es demasiado lindo.
Pero hay que verlo hasta el finalfinal porque el último plano es grandioso.
(Y nos vamos a ver Thumbsucker).
Thursday, March 16, 2006
soldaditos
Me pasa de vez en cuando. Como hoy. Porque llovía y tenía que salir temprano. Y me quedé parado así, un rato largo, en la puerta. Y miraba y solamente veía soldaditos. Todo era soldaditos. Y entonces no podía salir. Porque no, porque si hay soldaditos hay que quedarse en casa. Y me prendí un cigarrillo y esperé, hasta que se fueron todos. Y salí.
Cuando era chico, y a la mañana temprano llovía con soldaditos, mi mamá no nos dejaba ir al colegio. Y era grandioso ver soldaditos. Mi abuela le tenía miedo a la lluvia, y no la dejaba salir a mi mamá si llovía fuerte; y ella, en el piso, veía un montón de soldaditos. Porque cuando llueve fuerte, y las gotas de lluvia se estrellan en el suelo, forman por un instante un soldadito. Ella veía eso. Como esos soldaditos de plástico verde chiquititos, los que tienen una base chata para mantenerse parados; pero no todos: los que estaban como arrodillados en una pierna, y sostenían siempre su ametralladora ligeramente para arriba. Entonces, si a la mañana llovía, se asomaba a la calle para ver si había soldaditos; y si había, se acercaba a la cama y nos decía que sigamos durmiendo, porque estaba lloviendo con soldaditos. Y era lo mejor. Y hoy había soldaditos.
Si alguna vez tuviese hijos, y no es algo que piense seguido, todo tendría sentido en ese momento. Cuando me acerque a su cama y les diga bajito que no se levanten, que hoy se pueden quedar un rato más en la cama porque está lloviendo con soldaditos.
Cuando era chico, y a la mañana temprano llovía con soldaditos, mi mamá no nos dejaba ir al colegio. Y era grandioso ver soldaditos. Mi abuela le tenía miedo a la lluvia, y no la dejaba salir a mi mamá si llovía fuerte; y ella, en el piso, veía un montón de soldaditos. Porque cuando llueve fuerte, y las gotas de lluvia se estrellan en el suelo, forman por un instante un soldadito. Ella veía eso. Como esos soldaditos de plástico verde chiquititos, los que tienen una base chata para mantenerse parados; pero no todos: los que estaban como arrodillados en una pierna, y sostenían siempre su ametralladora ligeramente para arriba. Entonces, si a la mañana llovía, se asomaba a la calle para ver si había soldaditos; y si había, se acercaba a la cama y nos decía que sigamos durmiendo, porque estaba lloviendo con soldaditos. Y era lo mejor. Y hoy había soldaditos.
Si alguna vez tuviese hijos, y no es algo que piense seguido, todo tendría sentido en ese momento. Cuando me acerque a su cama y les diga bajito que no se levanten, que hoy se pueden quedar un rato más en la cama porque está lloviendo con soldaditos.
Monday, March 06, 2006
darling

No me copó tu Capote Philip.
Pero debo ser yo...
Catherine: a vos te amé.
Igual el groso es L. Ya estabamos sentados con nuestros pochoclos. Yo perfeccionando mi técnica de llevarme la bolsita a la boca y sacar la lengua para que se me peguen un montón de pochoclos y comerlos todos juntos. Y me dice: la adaptación del guión la hizo el hijo de La Jaula De Los Pájaros, ahora vas a mirar la peli con otros ojos.
Thursday, March 02, 2006
Sunday, February 19, 2006
woof

Almorzábamos y hacíamos zapping (L esta vez, porque yo tengo la marcada tendencia a dejar cosas como las 101 taradeces de e!, que encuentro curiosamente digestivas, casi tanto como americanidol), y nos quedamos como hipnotizados con una de las pelis más lindas que ví en mucho tiempo. Pillow Talk, del 59, con Doris Day y un churrasco absoluto, un metronoventa de ternura, Rock Hudson. La peli es la verdadera Down With Love, yo digo homenaje, L dice robo, en fin.
Y el viernes, después de una panzada feliz de Dani Umpi (gracias cp*!), y de atravesar el umbral al menemismo en palermo (Spellcafé), y ya borrachines de vino rico, le dije a L que está en mis planes convertirme eventualmente en un oso, serio muy serio, así que muy serio me respondió que eso jamás podía pasar, que me falta algo que es crucial para ser un oso: pelo. Le expliqué que a mí me sobra pelo, si de eso se trata, pero me dijo (y es cierto) que ni las patillas puedo dejarme, porque no me crecen. Detalles, le dije, porque ser un oso es una realidad espiritual (yo me entiendo, y tampoco esperaría que). Y entonces G me dijo la posta: que soy un oso encerrado en el cuerpo de un... willito.
(Buscando fotitos de Rock Hudson en internet, encontré *casi exclusivamente* sitios queer... Y está ok, supongo (algunos de estos sitios eran bastante simpáticos), pero aún así hay algo que me da bronca, mucha: ¿por qué un tipo terriblemente talentoso parece haber pasado a la posteridad *casi exclusivamente* por ser puto? ¿por qué Brokeback parece estar pasando a la posteridad *casi exclusivamente* porque son dos tipos los que se enamoran? Pero debe ser así, google no puede equivocarse, google es la voz de un millón de moscas. Cada vez que imagino a la hija de Ennis Del Mar, en algún momento después de la muerte del padre, entrando en el trailer y encontrando las dos camisas manchadas de sangre colgadas juntas y la postal en el armario, se me hace un nudo en la garganta, cada vez.)
Tuesday, February 14, 2006
olla
Debe ser como dice juania: un plan macabro (él es siempre sensible a teorías conspirativas como esta). Todas las remeras estampadas con palabras en italiano deben ocultar algún tipo de dispositivo mediante el cual, de todas al mismo tiempo, va a emanar alguna sustancia con el poder de convertir a las personas en zombies. Le pregunté si creía que sólo iba a afectar a los que las usan, y me dijo que no, porque ellos ya son zombies. Y es la única explicación que me parece coherente.

Recibí una postal de sugus, desde uruguay. Grandiosa.
Y el domingo L y yo participamos una velada encantadora.

Recibí una postal de sugus, desde uruguay. Grandiosa.
Y el domingo L y yo participamos una velada encantadora.
Monday, February 06, 2006
croon
No me puedo sacar esta peli de la cabeza. Y sospecho que así voy a estar algunos días más. Hoy me desperté una hora antes de que suene el despertador y tenía un nudo en la garganta.
La voy a ir a ver de nuevo, y como ya sé todo lo que va a pasar, creo que voy a llorar ininterrumpidamente desde el principio hasta el final.
Time to hit the hay, cowboy. I got a go. Come on, you're sleepin on your feet like a horse.
La voy a ir a ver de nuevo, y como ya sé todo lo que va a pasar, creo que voy a llorar ininterrumpidamente desde el principio hasta el final.
Time to hit the hay, cowboy. I got a go. Come on, you're sleepin on your feet like a horse.
Sunday, February 05, 2006
zoo
Últimamente no estoy de ánimo para sentarme a escribir.
Pero recién:
Estaba leyendo (sigo con El Pasado, que es lindo como acurrucarse en una cama recién hecha, con sábanas nuevas) pero me dieron ganas de mate y me acordé de esto que encontré ayer en boingboing. Entonces me puse a googlear SuperMarioPcFreeDownload. Y me bajé un SuperMario bastardo pero que para sacarme las ganas está ok (la música se parece bastante), y viene con una SuperMario Toolbar que probablemente nunca voy a poder sacar del explorer pero no me importa nada que se instale todo. Y funciona y soy muy torpe con el teclado porque jamás juego con la compu pero la musiquita y los ruiditos y los honguitos está todo igual. Estaba (estoy) re contento. Y de reojo veo a mi gata que juega con algo. Pero no está jugando, en realidad me trajo algo, y se acomodó con las manitos muy juntas y está esperando que yo me acerque y la miro y le pregunto ¿qué pasa Niceto? y me mira con ojos grandes.
Entonces me agacho yo, y entrecierro los ojos y me acomodo con la manos muy juntas y los dos miramos. ¿Qué es eso Niceto? le pregunto. Y *eso* se mueve. Y es como una criatura pequeña imposible de identificar que parece estar boca arriba. Muy muy chiquita. ¿Es un pajarito bebé? le pregunto a mi gata. Pero no, porque no tiene alas. Tiene manitos. Es como un hallazgo zoológico curiosísimo, en mi living, en un séptimo piso, en palermo. Me tranquilizo porque se ve claramente que es inofensivo. Y me intranquilizo porque dudo que haya aparecido en el mundo por generación espontánea. Y no me quiero imaginar, en fin.
Pero estaba sólo en casa, así que no tenía opción. Lo agarré con papel de cocina y lo llevé al balcón (L o alguien más tenía que verlo y confirmarme que sí, que era muy bizarro, y no sé de dónde salió, lo trajo Niceto y me lo dejó al lado de la compu, así como así). Y por las dudas tambien le saqué fotos. Y L llegó y me encontró jugando al SuperMario y antes de que me diga nada ya lo había arrastrado al balcón y lo vimos juntos (sí, también, agachados con las manos muy juntas). Y hace un rato se movía, le dije, y le saqué fotos. Oh, me dijo. Pero ya no se movía más. Tiralo, le dije. No, tiralo vos (y así un rato). Finalmente L lo agarró y lo dejó caer del séptimo piso. De todos modos ya no daba señales de vida. Y ya tenía las fotos.

Y ahora nos vamos a ver la peli de las vaqueras traviesas.
Pero recién:
Estaba leyendo (sigo con El Pasado, que es lindo como acurrucarse en una cama recién hecha, con sábanas nuevas) pero me dieron ganas de mate y me acordé de esto que encontré ayer en boingboing. Entonces me puse a googlear SuperMarioPcFreeDownload. Y me bajé un SuperMario bastardo pero que para sacarme las ganas está ok (la música se parece bastante), y viene con una SuperMario Toolbar que probablemente nunca voy a poder sacar del explorer pero no me importa nada que se instale todo. Y funciona y soy muy torpe con el teclado porque jamás juego con la compu pero la musiquita y los ruiditos y los honguitos está todo igual. Estaba (estoy) re contento. Y de reojo veo a mi gata que juega con algo. Pero no está jugando, en realidad me trajo algo, y se acomodó con las manitos muy juntas y está esperando que yo me acerque y la miro y le pregunto ¿qué pasa Niceto? y me mira con ojos grandes.
Entonces me agacho yo, y entrecierro los ojos y me acomodo con la manos muy juntas y los dos miramos. ¿Qué es eso Niceto? le pregunto. Y *eso* se mueve. Y es como una criatura pequeña imposible de identificar que parece estar boca arriba. Muy muy chiquita. ¿Es un pajarito bebé? le pregunto a mi gata. Pero no, porque no tiene alas. Tiene manitos. Es como un hallazgo zoológico curiosísimo, en mi living, en un séptimo piso, en palermo. Me tranquilizo porque se ve claramente que es inofensivo. Y me intranquilizo porque dudo que haya aparecido en el mundo por generación espontánea. Y no me quiero imaginar, en fin.
Pero estaba sólo en casa, así que no tenía opción. Lo agarré con papel de cocina y lo llevé al balcón (L o alguien más tenía que verlo y confirmarme que sí, que era muy bizarro, y no sé de dónde salió, lo trajo Niceto y me lo dejó al lado de la compu, así como así). Y por las dudas tambien le saqué fotos. Y L llegó y me encontró jugando al SuperMario y antes de que me diga nada ya lo había arrastrado al balcón y lo vimos juntos (sí, también, agachados con las manos muy juntas). Y hace un rato se movía, le dije, y le saqué fotos. Oh, me dijo. Pero ya no se movía más. Tiralo, le dije. No, tiralo vos (y así un rato). Finalmente L lo agarró y lo dejó caer del séptimo piso. De todos modos ya no daba señales de vida. Y ya tenía las fotos.

Y ahora nos vamos a ver la peli de las vaqueras traviesas.
Tuesday, January 24, 2006
Saturday, January 21, 2006
perrito
Se lo cuento a todos los que están por ahí, porque soy un fastidio. Así que también los voy a escribir acá. El sueño que tuve, o lo que queda de él. Es que justo cuando mi sicólogo se toma vacaciones tengo el sueño que uno sueña tener para contarle a su sicólogo. Era algo así Augusto: Era medianoche, y estaba con mi viejo, los dos solos, y algún tipo de dispositivo o aparato le corta la cabeza, a mi viejo, se la separa del cuerpo, pero eso de ninguna forma significaba que ahora estaba muerto, nada de eso, yo me llevo la cabeza a mi casa a esperar que me traigan el resto del cuerpo, y se hacen eso de las ocho de la mañana, y efectivamente llega el cuerpo, no sé quién lo trae, alguien, y como no es hasta el mediodía que voy a poder llevar todo a algún lugar para que unan lo que se había separado, acomodo la cabeza junto al cuerpo, todo en el piso, pongo la cabeza ahí donde tenía que ir, y cuando cabeza y cuerpo están juntos, en contacto, lógicamente, mi viejo se despierta, y empieza a hablar, y le explico que lo mejor es que no lo intente, porque cualquier movimiento puede cortar o interrumpir es contacto que lo despertó, y estoy contento de poder cuidar a mi viejo, muy satisfecho de mí mismo (!), y como falta bastante para el mediodía, pongo un almohadón en el pecho de mi viejo, y apoyo un album de fotos para ir hojeando, para entretenerlo, fotos de cuando mi hermana y yo eramos chicos, y mi viejo sonrie, y está como enternecido de ver esas fotos, y entonces caigo en la cuenta de que para coser la cabeza en el cuerpo de nuevo, los médicos, o quien sea, van a tener que anestesiarlo, pero su corazón ya no funciona, la sangre ya no circula, y esa inyección no va a servir de nada, y ahora es una pesadilla, y nunca tendría que habérmelo llevado a mi casa, tendría que haber hecho algo inmediatamente, ahora no hay con qué, yo lo había matado, y me desperté.
Cuando era chico, y a mi hermana le daban para leer libros en el colegio, se los tenía que leer yo, porque si no no los entendía. En voz alta, y tenía que hacer las voces de los personajes. Las De Barranco fue grandioso. Pero una vez era una antología de cuentos fantásticos argentinos, y había uno que se llamaba La Muerte Del Perrito, una página y medio. Hermosísimo. Y era así, unos nenes jugaban en el jadín, y el perrito se asoma por entre las rejas, y pasa un auto y le corta la cabeza, y los nenes se la vuelven a poner, y el perrito se levanta, da unos pasos hasta el nene que era su dueño, le lame la mano y cae. Y mi hermana se reía de mí porque yo no podía parar de llorar.
Y enero en Buenos Aires podría haber sido tan distinto si en vez de invertir tanto tiempo y energía en pensar excusas para explicar por qué no hago todo lo que tendría que estar haciendo, efectivamente hiciese algo de todo eso. Aunque lo de aceptar la idea de una huelga silenciosa por la nostalgia de unas vacaciones que necesito y no me puedo tomar en verano, bien podría tener sentido. Así que con L decidimos postergar las vacas hasta abril, y él propuso ir a Brasil, y a mí me parece ok, porque nunca fui a Brasil, y en mi imaginario todo Brasil se reduce a un pan de azucar, una garota de ipanema, una favela, una playa, lo *exótico*, y una caipirinha.
Pero mientras vamos mucho al cine con Gus (un verdadero totoro de Miyazaki), y celebramos ver a Carrie (Sarita), en una peli muy mala muy linda, y vamos al Malba a ver Rohmer un montón (hay que ir sólo porque alguien alguna vez dijo que ver una película de Rohmer es como ver crecer una planta, y porque Delphine de El Rayo Verde es la síntesis perfecta de todas mis amigas juntas), y también vamos al teatro y vimos Rancho ayer, en el camarín, y L y Gus creen que a la obra le falta desarrollo pero yo creo que no, porque para mí es hermosa así como es, y estoy profundamente convencido de que la belleza es autoportante, y no necesita nada para justificarse a sí misma más que ser bella, y eso es Rancho.
Cuando era chico, y a mi hermana le daban para leer libros en el colegio, se los tenía que leer yo, porque si no no los entendía. En voz alta, y tenía que hacer las voces de los personajes. Las De Barranco fue grandioso. Pero una vez era una antología de cuentos fantásticos argentinos, y había uno que se llamaba La Muerte Del Perrito, una página y medio. Hermosísimo. Y era así, unos nenes jugaban en el jadín, y el perrito se asoma por entre las rejas, y pasa un auto y le corta la cabeza, y los nenes se la vuelven a poner, y el perrito se levanta, da unos pasos hasta el nene que era su dueño, le lame la mano y cae. Y mi hermana se reía de mí porque yo no podía parar de llorar.
Y enero en Buenos Aires podría haber sido tan distinto si en vez de invertir tanto tiempo y energía en pensar excusas para explicar por qué no hago todo lo que tendría que estar haciendo, efectivamente hiciese algo de todo eso. Aunque lo de aceptar la idea de una huelga silenciosa por la nostalgia de unas vacaciones que necesito y no me puedo tomar en verano, bien podría tener sentido. Así que con L decidimos postergar las vacas hasta abril, y él propuso ir a Brasil, y a mí me parece ok, porque nunca fui a Brasil, y en mi imaginario todo Brasil se reduce a un pan de azucar, una garota de ipanema, una favela, una playa, lo *exótico*, y una caipirinha.
Pero mientras vamos mucho al cine con Gus (un verdadero totoro de Miyazaki), y celebramos ver a Carrie (Sarita), en una peli muy mala muy linda, y vamos al Malba a ver Rohmer un montón (hay que ir sólo porque alguien alguna vez dijo que ver una película de Rohmer es como ver crecer una planta, y porque Delphine de El Rayo Verde es la síntesis perfecta de todas mis amigas juntas), y también vamos al teatro y vimos Rancho ayer, en el camarín, y L y Gus creen que a la obra le falta desarrollo pero yo creo que no, porque para mí es hermosa así como es, y estoy profundamente convencido de que la belleza es autoportante, y no necesita nada para justificarse a sí misma más que ser bella, y eso es Rancho.
Monday, January 09, 2006
hawaii

Hace un rato me escondí atrás de la cama, para molestar a L. Y aunque pensé que me iba a terminar aburriendo de esperar a que se de cuenta de que no estaba por ningún lado, me empezó a buscar. Sin mucho interés supongo, pero me llamaba, y veía sus pies desde abajo de la cama, y me estaba descostillando de la risa y fue grandioso. Y me encontró y se enojó. Y casi no me podía parar de la risa. Y todavía no me habla (!?). Y por eso escribo esto.
Espero que me haga caso. Le dije que tenía la responsabilidad de terminar de transcodear* Princess Mononoke de Miyazaki que nos bajamos para hoy a la noche verla en la cama en dvd. Pero voy a esperar para preguntarle cómo va eso.
*es de cuando dice "transcoding" y no se termina más.
Monday, January 02, 2006
swinging
Desde que estamos juntos pasamos el 31 en casa. Solos. Juntos. Con las gatas. Es eso. Comprar todas cosas ricas, un vino rico (y que además tenga la etiqueta más linda, ese soy yo). Y Lucas me pregunta qué quiero cenar, y le digo todas las cosas que quiero que tenga la cena, y él prepara algo con todo eso. En la mesa un queso rico y velitas. Y ponemos Frank Sinatra random. Y heaven i´m in heaven. Botellitas de Chandon mini para mí (L no toma champagne, allá él). Y chunguichungui. Y todo ternura ñoña. Y my heart beats so that I can hardly speak. Y brindamos en el balcón y hay cañítas voladoras, un montón, por todos lados. Y es eso. That charm about you.
Friday, December 30, 2005
paseo

Hojenado la última Neo2, encontré no sólo lo que podría ser el mejor autorretrato que ví alguna vez jamás, sino una de las imágenes más inquietantes en mucho tiempo. La foto es de Rankin.
Traté de explicar esto varias veces, pero básicamente contar un sueño es engorroso, porque si hay categorías de experiencias intransferibles, esta es de las que no hay con qué (y además escuchar relatos de sueños ajenos puede ser un fastidio, tal vez por la misma razón). Pero este sueño fue distinto a todos los otros. Y fué hace mucho. Y no tenía imágenes, o yo no las recuerdo. Pero en los sueños nunca hace falta la escena cero, porque desde el principio entendés qué está pasando. Y lo recuerdo perfecto. Yo estaba teniendo sexo conmigo mismo. Pero no con alguien que se parecía mucho a mí, de hecho yo soñaba que tenía los ojos cerrados. Yo sencillamente sabía que era yo, porque en el sueño era las dos conciencias al mismo tiempo. Era sensible en dos cuerpos a la vez. Era sentir que tocaba y que era tocado al mismo tiempo. Y tal vez no es más que la más grotesca de las fantasías masturbatorias, pero tan imposible o impensable, y tan total, y tan realmente así, y tan juraría que por un momento podía sentir dos cuerpos a la vez, de verdad, y solamente eso, que sigue siendo una de las experiencias más fabulosas de mi vida, aunque no encuentre una categoría posible donde acomodarla, o probablemente por eso.
Tendrían que existir, así como hay paseadores de perros, paseadores de Converse. Que dejen cartelitos en los postes de luz: Rodrigo (por poner un nombre), paseador de zapatillas, calzo 41. Y lo llamás y pasa por tu casa y se pone tus Converse nuevas blancas (odiosamente blancas), y sale a pasear, se tira a leer en la plaza, juega un fulbito, pasea su perro, y cuando te las devuelve y evaluás que hizo su trabajo, le pagás, y salís a la calle con tus zapatillas perfectas. Eso pensaba hoy.
Thursday, December 29, 2005
Tuesday, December 27, 2005
tatenguita
Crecer es, en mi caso, divertirme como si tuviese seis años.
Y claro, basta escribir eso para que el random me dispare con un tema de la banda de sonido de Garden State, y todas las cosas...
Y claro, vino Sophie Ellis Bextor al rescate, Take Me Home, muy apropiado, sigo:
Fué como una película viajar a Santa Fe, de esas en las que un personaje (imaginemos un niño) pide un deseo, y atraviesa sin saberlo el umbral, y se despierta al día siguiente y tiene 25 años*, y una vida grandiosa, y hace lo que le gusta, y aparece un novio que parece un tipo muy interesante, que dice que me cuide, que lo llame, que me va a extrañar, que parece capaz de tomarme en serio (o no tomarme en serio en absoluto, que para el caso sería lo mismo, especialmente si tenés seis años), y aparece mi viejo, musculosa y bermudas y ojotas, y mientras esperamos a mi hermana me cuenta indignado que la vinería de Lacroze y Zapata no tiene delivery, y aparece mi hermana y caigo en la cuenta: los tres pedimos el mismo deseo. Los tres atravesamos el mismo umbral. Y pase lo que pase no tengo que decir nada. Y digo que llevo la cámara, y que armé unos compilados para la ruta (tema uno: George Harrison I´ve Got My Mind Set On You, porque sí, mi hermana mi viejo y yo volvíamos de la pileta en Santa Fe escuchando ese tema a todo volumen cantando los tres; sólo que ahora es mejor, porque tengo mi camara digital, soy un nene grande, y el baúl está lleno de brut nature). No estaba viajando a Santa Fe a poner las cosas en crisis, a provocar, a ser un espejo de la acotada y asfixiante concepción general del mundo de la familia de mi viejo... eso es muy noventas. Estaba viajando a ser guillermito. Igual que mi viejo. Igual que mi hermana. Estaba viajando a ser terriblemente inocente, y terriblemente curioso, y terriblemente feliz, como un nene de seis años. ¿Cómo no voy a sucumbir en un espacio donde todos ven a guillermito, donde voy a ser guillermito para siempre?

El pecebre en el hogar, en una foto muy menina, y muy fuera de foco.
*Era un nene de seis que se despertó y tenía veinticinco, no un nene de veinticinco que se despertó y tenía seis. No es lo mismo.
Y claro, basta escribir eso para que el random me dispare con un tema de la banda de sonido de Garden State, y todas las cosas...
Y claro, vino Sophie Ellis Bextor al rescate, Take Me Home, muy apropiado, sigo:
Fué como una película viajar a Santa Fe, de esas en las que un personaje (imaginemos un niño) pide un deseo, y atraviesa sin saberlo el umbral, y se despierta al día siguiente y tiene 25 años*, y una vida grandiosa, y hace lo que le gusta, y aparece un novio que parece un tipo muy interesante, que dice que me cuide, que lo llame, que me va a extrañar, que parece capaz de tomarme en serio (o no tomarme en serio en absoluto, que para el caso sería lo mismo, especialmente si tenés seis años), y aparece mi viejo, musculosa y bermudas y ojotas, y mientras esperamos a mi hermana me cuenta indignado que la vinería de Lacroze y Zapata no tiene delivery, y aparece mi hermana y caigo en la cuenta: los tres pedimos el mismo deseo. Los tres atravesamos el mismo umbral. Y pase lo que pase no tengo que decir nada. Y digo que llevo la cámara, y que armé unos compilados para la ruta (tema uno: George Harrison I´ve Got My Mind Set On You, porque sí, mi hermana mi viejo y yo volvíamos de la pileta en Santa Fe escuchando ese tema a todo volumen cantando los tres; sólo que ahora es mejor, porque tengo mi camara digital, soy un nene grande, y el baúl está lleno de brut nature). No estaba viajando a Santa Fe a poner las cosas en crisis, a provocar, a ser un espejo de la acotada y asfixiante concepción general del mundo de la familia de mi viejo... eso es muy noventas. Estaba viajando a ser guillermito. Igual que mi viejo. Igual que mi hermana. Estaba viajando a ser terriblemente inocente, y terriblemente curioso, y terriblemente feliz, como un nene de seis años. ¿Cómo no voy a sucumbir en un espacio donde todos ven a guillermito, donde voy a ser guillermito para siempre?

El pecebre en el hogar, en una foto muy menina, y muy fuera de foco.
*Era un nene de seis que se despertó y tenía veinticinco, no un nene de veinticinco que se despertó y tenía seis. No es lo mismo.
Tuesday, December 20, 2005
sunset
Y yo también tuve mi cenashowfiesta de findeaño. Y sería una de esas noches llenas de clichés demasiado obvios como para hacer de eso otro relato del tipo viaje-a-la-penumbra (especialmente porque ya hay mucha literatura sobre el tema, bloguerilmente hablando; y mucha muy buena). No faltó nada, como era de esperarse: mesas muy largas muy sindicales, banda en vivo haciendo covers de hits latinos, travestitransformistapatovica que se agarraba el bulto, strippers, todas ellas Portsaid, todos ellos camisita OldBridge. Yo fui con mi remera celeste esa con la cara de Michael Fox estampada en magenta y amarillo patito que dice sweetheart (pum para arriba). Y aunque hace tiempo que me aburre cuestionar estas cosas, porque no da tener una crisis de identidad en un espacio que tan claramente nada tiene que ver conmigo, tuve la suerte de escuchar la mejor definición posible de la única fórmula válida para estar ahí, y abrazarlo todo. A little piece of wisdom, en el momento justo: Mi compañera C le dijo a mi compañera E (que definitivamente no la estaba pasando nada bien) DALE! DEJATE COJER POR ESTA ESTÉTICA!
Y después de eso mi recuerdo se vuelve nebuloso... Pero podría jurar que pedía (completamente borracho) por favor que pasen Miranda (!), y que llegué a decir cosas como: El primer disco de Miranda es como La Ciénaga, y el segundo es como La Niña Santa; el primero es una obra de arte, el segundo no (!?).
Rolando diría: Pensamiento que se me escapa, y yo lo quería escribir; escribo, en cambio, que se me escapó... Bueno, quería hacer una tarjeta en pdf para colgar acá, con algún mensaje pertinente a estas fechas. Tenía la idea y todo, a saber: iba a escanear un montón de fruta abrillantada, que muy prolijamente yo mismo iba a sacar de una porción de pan dulce, y en illustrator le iba a dibujar a cada una un gesto que sea el mayor desamparo posible, un golpe así bien bajo. Y alguna frase como las de las campañas en los ochentas para no abandonar a tu perrito en la ruta (boby mi buen amigo). Hay muchos prejuicios alrededor de la fruta abrillantada, todos infundados.
Roto es radical, y defiende el consumo indiscriminado de fruta abrillantada. Y el uso (con precaución y la compañía de mayores autorizados) de estrellitas y chasquibum. Y se compadece de todos aquellos que, como yo, pasaron tres horas de sus vidas deseando desesperadamente que ese mono gigante se muera de una vez por todas (si no podés contar la historia que querés contar en menos de dos horas, hay algo que no está funcionando Peter).
Y después de eso mi recuerdo se vuelve nebuloso... Pero podría jurar que pedía (completamente borracho) por favor que pasen Miranda (!), y que llegué a decir cosas como: El primer disco de Miranda es como La Ciénaga, y el segundo es como La Niña Santa; el primero es una obra de arte, el segundo no (!?).
Rolando diría: Pensamiento que se me escapa, y yo lo quería escribir; escribo, en cambio, que se me escapó... Bueno, quería hacer una tarjeta en pdf para colgar acá, con algún mensaje pertinente a estas fechas. Tenía la idea y todo, a saber: iba a escanear un montón de fruta abrillantada, que muy prolijamente yo mismo iba a sacar de una porción de pan dulce, y en illustrator le iba a dibujar a cada una un gesto que sea el mayor desamparo posible, un golpe así bien bajo. Y alguna frase como las de las campañas en los ochentas para no abandonar a tu perrito en la ruta (boby mi buen amigo). Hay muchos prejuicios alrededor de la fruta abrillantada, todos infundados.
Roto es radical, y defiende el consumo indiscriminado de fruta abrillantada. Y el uso (con precaución y la compañía de mayores autorizados) de estrellitas y chasquibum. Y se compadece de todos aquellos que, como yo, pasaron tres horas de sus vidas deseando desesperadamente que ese mono gigante se muera de una vez por todas (si no podés contar la historia que querés contar en menos de dos horas, hay algo que no está funcionando Peter).
Sunday, December 11, 2005
lovely 2 c u
Cos you're my Number 1
I'm like a dog to get you


Lejos, una de las canciones más lindas de este año. De Goldfrapp, uno de los hallazgos de este año (gracias PM, gracias). Adictiva. Para sucumbir.
Y dijo Pitchfork del último disco: the prime-time flagship of glammy electroid dancefloor pop, curiously expensive-sounding and accessible to all, but strangely stripped of the functionalism of the dance record and the full thrills of pop.
Para envolver en papel de relago y dejar abajo del arbolito.
(No sé qué dice la ley argentina sobre estas cosas, pero hace un tiempo, cuando instalaba un programa para bajar música, actividad más que gratificante, apareció un disclaimer que explicaba por qué tenía sentido que exista ese programa, por qué no violaba ninguna ley sino que por el contrario, brindaba un servicio útil y necesario. Decía que la ley contempla la posibilidad, y el derecho, de los consumidores de música, de hacerse copias de seguridad de los discos, no sea cosa que... Entonces este programa, igual que todos los otros, igual que el hecho de que circule música por internet para poder bajarla, ayuda a los consumidores a poder bajar copias de seguridad de la música que tienen en sus discotecas, sin necesidad del engorroso trámite de tener que ponerse a copiar discos, cambiarlos de formato y demás burocracia. ¿Para qué voy a perder tiempo haciendo eso, si otra persona en algún lugar del mundo ya se tomó ese trabajo y comparte su copia de seguridad para que yo pueda tener la mía haciendo un solo clic? Las copias originales suelen tener esa curiosa capacidad de perderse, de desaparecer de mi colección, pero no tengo que preocuparme demasiado, porque siempre puedo disponer de mis copias de seguridad, que bajan como torrentes en cometas.)
(la calaverita es un guiño subliminal a MrJS).
I'm like a dog to get you


Lejos, una de las canciones más lindas de este año. De Goldfrapp, uno de los hallazgos de este año (gracias PM, gracias). Adictiva. Para sucumbir.
Y dijo Pitchfork del último disco: the prime-time flagship of glammy electroid dancefloor pop, curiously expensive-sounding and accessible to all, but strangely stripped of the functionalism of the dance record and the full thrills of pop.
Para envolver en papel de relago y dejar abajo del arbolito.
(No sé qué dice la ley argentina sobre estas cosas, pero hace un tiempo, cuando instalaba un programa para bajar música, actividad más que gratificante, apareció un disclaimer que explicaba por qué tenía sentido que exista ese programa, por qué no violaba ninguna ley sino que por el contrario, brindaba un servicio útil y necesario. Decía que la ley contempla la posibilidad, y el derecho, de los consumidores de música, de hacerse copias de seguridad de los discos, no sea cosa que... Entonces este programa, igual que todos los otros, igual que el hecho de que circule música por internet para poder bajarla, ayuda a los consumidores a poder bajar copias de seguridad de la música que tienen en sus discotecas, sin necesidad del engorroso trámite de tener que ponerse a copiar discos, cambiarlos de formato y demás burocracia. ¿Para qué voy a perder tiempo haciendo eso, si otra persona en algún lugar del mundo ya se tomó ese trabajo y comparte su copia de seguridad para que yo pueda tener la mía haciendo un solo clic? Las copias originales suelen tener esa curiosa capacidad de perderse, de desaparecer de mi colección, pero no tengo que preocuparme demasiado, porque siempre puedo disponer de mis copias de seguridad, que bajan como torrentes en cometas.)
(la calaverita es un guiño subliminal a MrJS).
Thursday, December 08, 2005
balalá
Hoy salí al palier para acompañar a L a tomarse el colectivo (él sólo tiene feriados americanos) y ví en la puerta del departamento B una estrella dorada. Horriblehermosa. Grandioso. Quién sabe, tal vez se están cagando a palos ahí adentro, o se odian y son infelices, pero como sea, no es asunto mío. Lo que sí es mío llega exactamente hasta la puerta, donde ahora hay una estrella dorada, más horrible que hermosa según mis estándares, pero grandiosa de todos modos. Es la navidad. Y me pone contento. ¿Que sentido tendría cuestionar eso? En algún momento debe haber tenido sentido hacer de la navidad un debate ideológico y estúpido, pero si funciona para que aparezcan lucecitas de colores por todos lados, es sencillamente fantástico. Lucecitas de colores. Por todos lados. Estoy perdido.
Cuando era chico (o adolescente; una etapa que, dijo Daniel Molina en una entrevista hace unos días, habría que prohibir por cruel, y fue una broma pero todos entendemos a qué se refiere) tenía que ir a Santa Fe a pasar nochebuena. Y lo odiaba. Y para colmo era contestatario, y agarraba la cámara de video para hacer el documental de la *verdadera* navidad, de todo lo que no aparece en las fotos que sacaba mi viejo, y me parecía coherente y lúcido... y eso me convertía a mí en el único ser despreciable esa noche. Porque había un montón de lucecitas de colores, y fuegos artificiales (que amo), y mi abuela estaba toda empirifollada, y yo le tendría que haber dicho que estaba hermosa (aunque sus peinados nunca se ajusten a mis estándares), porque estaba hermosa. Este año le voy a decir que está hermosa, y que me encanta cómo decoró su casa, y que es una muy buena idea armar el pecebre en el hogar para darle un uso en verano, y que su viteltoné es único. La odié siempre por ser de ultraderecha, por votar a Aldo Rico, por ser más reaccionaria que los militares, por ser odiosa, por bajar la voz para que no escuchen los vecinos, por llamarme guillermito (hasta el día de hoy), por mandarme giros para que haga terapia (ella que repudia a los sicólogos), por estar decepcionada porque no soy cura (y encima ateo, dios!). Pero este año me mandó una carta invitándome a pasar la navidad en su casa (le encanta enviar invitaciones formales por correo) y me escribió que desde ya Lucas está invitado también. Y me desarmó. Y seguro lo hace porque es correcto, y también podría odiarla por eso, pero se sentó, y escribió L-u-c-a-s en su carta, y me la mandó. Abu (yo le digo así) sos lo más. Igual que esta canción de Britney, My Only Wish.
Está por llegar mi vieja. Le dije que me daba fiaca salir, que me pase a visitar ella, a la hora de la merienda. Sí mamá, cuando salgas de gimnasio venite. Y voy a armar el arbolito (sacarlo de la bolsa, en realidad; es una miniatura de arbolito todo chiquito todo kistch todo lindo) y lo voy a enchufar para que se prendan y apaguen las lucecitas. Y me va a contar, lo sé, lo que me cuenta todos los años: que cuando yo era un bebé, antes de cumplir un año, y mi hermana no existía, y ella tenía que ir a Santa Fe, se escapaba de la casa de mi abuela (escaparse es el término exacto para ella, porque tenía 19 años, y a esa edad te escapás) conmigo en el cochecito, y paseaba por la peatonal y yo, que no podía hablar, o balbuceaba cosas, había inventado una palabra para "arbolito de navidad" que era algo así como balalá, y lo único que hacía era señalar a cada arbolito que nos cruzábamos y decir balalá.
Cuando era chico (o adolescente; una etapa que, dijo Daniel Molina en una entrevista hace unos días, habría que prohibir por cruel, y fue una broma pero todos entendemos a qué se refiere) tenía que ir a Santa Fe a pasar nochebuena. Y lo odiaba. Y para colmo era contestatario, y agarraba la cámara de video para hacer el documental de la *verdadera* navidad, de todo lo que no aparece en las fotos que sacaba mi viejo, y me parecía coherente y lúcido... y eso me convertía a mí en el único ser despreciable esa noche. Porque había un montón de lucecitas de colores, y fuegos artificiales (que amo), y mi abuela estaba toda empirifollada, y yo le tendría que haber dicho que estaba hermosa (aunque sus peinados nunca se ajusten a mis estándares), porque estaba hermosa. Este año le voy a decir que está hermosa, y que me encanta cómo decoró su casa, y que es una muy buena idea armar el pecebre en el hogar para darle un uso en verano, y que su viteltoné es único. La odié siempre por ser de ultraderecha, por votar a Aldo Rico, por ser más reaccionaria que los militares, por ser odiosa, por bajar la voz para que no escuchen los vecinos, por llamarme guillermito (hasta el día de hoy), por mandarme giros para que haga terapia (ella que repudia a los sicólogos), por estar decepcionada porque no soy cura (y encima ateo, dios!). Pero este año me mandó una carta invitándome a pasar la navidad en su casa (le encanta enviar invitaciones formales por correo) y me escribió que desde ya Lucas está invitado también. Y me desarmó. Y seguro lo hace porque es correcto, y también podría odiarla por eso, pero se sentó, y escribió L-u-c-a-s en su carta, y me la mandó. Abu (yo le digo así) sos lo más. Igual que esta canción de Britney, My Only Wish.
Está por llegar mi vieja. Le dije que me daba fiaca salir, que me pase a visitar ella, a la hora de la merienda. Sí mamá, cuando salgas de gimnasio venite. Y voy a armar el arbolito (sacarlo de la bolsa, en realidad; es una miniatura de arbolito todo chiquito todo kistch todo lindo) y lo voy a enchufar para que se prendan y apaguen las lucecitas. Y me va a contar, lo sé, lo que me cuenta todos los años: que cuando yo era un bebé, antes de cumplir un año, y mi hermana no existía, y ella tenía que ir a Santa Fe, se escapaba de la casa de mi abuela (escaparse es el término exacto para ella, porque tenía 19 años, y a esa edad te escapás) conmigo en el cochecito, y paseaba por la peatonal y yo, que no podía hablar, o balbuceaba cosas, había inventado una palabra para "arbolito de navidad" que era algo así como balalá, y lo único que hacía era señalar a cada arbolito que nos cruzábamos y decir balalá.
Sunday, December 04, 2005
embraceable
El domingo es el día más ñoño de la semana. Es además un día para celebrar la ñoñez (especialmente si está nublado como hoy). Para abandonarse y embriagarse de ñoñez. Para remolonear toda la mañana en la cama. Para caer en la cuenta de que *necesito* pijamas para para poder dejármelos todo el día. Para poner en random el complete song book de Ella Fitzgerald. Adoro los domingos bien domingos como hoy. Si fuese un día de la semana sería un domingo, un domingo a la tarde, porque nunca quiero que se termine. Y todo pasa así, despacito. Y se va yendo pero todavía no se fue. Las cosas, el cielo, la música, todo tiene como un fade que no hay que molestar. No me puedo cansar o aburrir de estar acá ahora, porque nada más es lindo. De la misma forma que dejo loopeando los temas que me gustan, dejaría loopeando este momento, toda esta tarde; y solamente por eso es linda. Pero no puedo hacer eso, y supongo que ella sabe y se divierte conmigo, y me dice que no sea tan tonto, que voy bien, que no le haga preguntas, que me quede ahí donde estoy, que haga eso, que me sonría, que suba el volumen y que baile, y tiene la voz de Ella y me dice anything goes.
Y para terminar este domingo ñoño, le dije a L que en vez de volver a casa, nos encontremos en Planet Movie porque tengo antojo de Generación X (un verdadero ñoñazo). Y L se reía de mí porque me tropezaba por la calle porque sí, estoy embriagado de domingo y borrachín de destornillarores que me preparé tan tan ricos.

Y agrego una memorable ñoño quote: There's no point to any of this. It's all just a... a random lottery of meaningless tragedy and a series of near escapes. So I take pleasure in the details. You know... a quarter-pounder with cheese, those are good, the sky about ten minutes before it starts to rain, the moment where your laughter becomes a cackle... and I sit back and I smoke my Camel Straights and I ride my own melt.
Y para terminar este domingo ñoño, le dije a L que en vez de volver a casa, nos encontremos en Planet Movie porque tengo antojo de Generación X (un verdadero ñoñazo). Y L se reía de mí porque me tropezaba por la calle porque sí, estoy embriagado de domingo y borrachín de destornillarores que me preparé tan tan ricos.

Y agrego una memorable ñoño quote: There's no point to any of this. It's all just a... a random lottery of meaningless tragedy and a series of near escapes. So I take pleasure in the details. You know... a quarter-pounder with cheese, those are good, the sky about ten minutes before it starts to rain, the moment where your laughter becomes a cackle... and I sit back and I smoke my Camel Straights and I ride my own melt.
Friday, December 02, 2005
welcome
Hola! esto es para la persona (quien quiera que haya sido) que llegó a este blog buscando corazoncitos dorins. Y me enojo con quien quiera que haya sido que tuvo la torcida idea de rediseñar la cajita.
(search.latam.msn.com/spresults.aspx?q=corazoncitos dorins&FORM=IE5)
(search.latam.msn.com/spresults.aspx?q=corazoncitos dorins&FORM=IE5)
Monday, November 28, 2005
smoke
Soy un adicto perdido:
Fumo desde que tengo memoria (o no me puedo imaginar sin fumar, que sería lo mismo). Siempre Lucky. Siempre Minibic blanco (llevo incluso uno de repuesto en el morral, como una rueda de auxilio). Y desde el principio sabía que esta clase de decisiones eran cruciales. Y que iban a ser muy útiles en el futuro. Como cuando te despertás cada mañana y por un instante tenés que hacer memoria y recordar quien sos. Yo lo elegí como un indicio claro, preciso. Me encantaría en algún momento aprender a dejar espacios vacantes, como en ese juego que tiene fichitas dispuestas en un tablero con forma de cruz, y está todo completo excepto en el casillero del centro, y es necesario hacer saltar una de las fichas a ese espacio vacio para que empiece una cadena de saltos en todas direcciones. Para que empiece el juego. Tiene que haber un espacio vacante para empezar a jugar. Tiene que faltar algo. Pero los espacios vacios siempre me hicieron sentir incómodo. Siempre me refugié en la idea de que para cada uno de esos espacios existía (porque siempre había existido) algo que podía acomodarse perfectamente ahí. Un mundo perfectamente estático entonces. Y conmoverme siempre fue tener esa íntima certeza de ser testigo de algo que encajaba perfecto. Pero nunca se acaba y es agotador, porque las posibilidades son infinitas, pero sólo una es la correcta, cada vez. Tal vez, si hubiese tenido la certeza de que alguién, por la razón que sea, había decidido deliberadamente que yo exista en el mundo, hubiese podido inventar todo un mundo vacio para mí. Pero no fue así, y mi trabajo fue todo otro.
Entonces no hay decisiones ligeras. O algo tan ligero como fumarse un cigarrillo, y tan hermoso, y tan íntimo, por un instante hace que sólo exista eso, y todo el mundo, y todo el tiempo desaparece, o se condensa en ese instante, que siempre encaja perfecto. Y es tan fácil de llevar en el bolsillo. Es un instante sin angustia porque es un instante sin tiempo. Y es real. Y cada futuro cigarrillo es la promesa y la confirmación de que es real, de que es posible que todo encaje al margen de todo. Esos instantes en que todo encaja son la droga perfecta. Y un cigarrillo es la versión de bolsillo de ese fenómeno que hace que todo tenga sentido, es la miniatura de eso, es el souvenir del abismo.
Estar, en el sentido más amplio de la palabra, sucede en un instante. Y siempre sucede en ese instante, en el de prender un cigarrillo. Y no podría vivir sin algo que me lo recuerde cada vez. Es genial: la felicidad se compra en los kioskos, en atados de veinte felicidades.
Y funciona para medir el tiempo. Es de las unidades de medida de verdad. Es un tiempo tangible. La vida sucede entre cigarrillo y cigarrillo.
Fumo desde que tengo memoria (o no me puedo imaginar sin fumar, que sería lo mismo). Siempre Lucky. Siempre Minibic blanco (llevo incluso uno de repuesto en el morral, como una rueda de auxilio). Y desde el principio sabía que esta clase de decisiones eran cruciales. Y que iban a ser muy útiles en el futuro. Como cuando te despertás cada mañana y por un instante tenés que hacer memoria y recordar quien sos. Yo lo elegí como un indicio claro, preciso. Me encantaría en algún momento aprender a dejar espacios vacantes, como en ese juego que tiene fichitas dispuestas en un tablero con forma de cruz, y está todo completo excepto en el casillero del centro, y es necesario hacer saltar una de las fichas a ese espacio vacio para que empiece una cadena de saltos en todas direcciones. Para que empiece el juego. Tiene que haber un espacio vacante para empezar a jugar. Tiene que faltar algo. Pero los espacios vacios siempre me hicieron sentir incómodo. Siempre me refugié en la idea de que para cada uno de esos espacios existía (porque siempre había existido) algo que podía acomodarse perfectamente ahí. Un mundo perfectamente estático entonces. Y conmoverme siempre fue tener esa íntima certeza de ser testigo de algo que encajaba perfecto. Pero nunca se acaba y es agotador, porque las posibilidades son infinitas, pero sólo una es la correcta, cada vez. Tal vez, si hubiese tenido la certeza de que alguién, por la razón que sea, había decidido deliberadamente que yo exista en el mundo, hubiese podido inventar todo un mundo vacio para mí. Pero no fue así, y mi trabajo fue todo otro.
Entonces no hay decisiones ligeras. O algo tan ligero como fumarse un cigarrillo, y tan hermoso, y tan íntimo, por un instante hace que sólo exista eso, y todo el mundo, y todo el tiempo desaparece, o se condensa en ese instante, que siempre encaja perfecto. Y es tan fácil de llevar en el bolsillo. Es un instante sin angustia porque es un instante sin tiempo. Y es real. Y cada futuro cigarrillo es la promesa y la confirmación de que es real, de que es posible que todo encaje al margen de todo. Esos instantes en que todo encaja son la droga perfecta. Y un cigarrillo es la versión de bolsillo de ese fenómeno que hace que todo tenga sentido, es la miniatura de eso, es el souvenir del abismo.
Estar, en el sentido más amplio de la palabra, sucede en un instante. Y siempre sucede en ese instante, en el de prender un cigarrillo. Y no podría vivir sin algo que me lo recuerde cada vez. Es genial: la felicidad se compra en los kioskos, en atados de veinte felicidades.
Y funciona para medir el tiempo. Es de las unidades de medida de verdad. Es un tiempo tangible. La vida sucede entre cigarrillo y cigarrillo.
Saturday, November 26, 2005
bbq ribs
Mi viejo ahora quiere una foto de Lucas y mía para poner en su casa. Insiste en que vayamos juntos a Santa Fe para navidad. Llama a mi casa cuando sabe que no estoy para que lo atienda Lucas (yo no llamaría a mi casa si sé que no estoy, aunque no tenga la menor idea de qué significa eso). Mi hermana me cuenta que cuando ella empezó a salir con su novio (ahora marido, yo fuí testigo y firmé) mi viejo no hacía otra cosa que compararlo con Lucas, sólo para molestarla. A Lucas le gusta la comida agridulce, entonces ahora mi viejo nos lleva a todos a cenar a Kansas (donde todo tiene sabor a Disneyworld y salsa barbacoa). Mi viejo incluso quiere abrir su propio restorán, y quiere que Lucas se involucre (aparentemente puede prescindir de la gráfica, que yo le ofrecí, pero no de Lucas, que btw es guionista de cine). Y me llama por teléfono, mi viejo, y cuando le digo que estoy solo, me dice: ah! hace tiempo te quiero preguntar algo pero no puedo porque siempre estás con Lucas (oh-my-god, pienso, como dicho por Janice la novia de Chandler); entonces baja la voz (nunca fue una persona brillante) y me dice: ¿no notaste que Lucas tiene escalofríos bastante seguido? (...) ¿qué? este... no, no sé, será algún tipo de tic nervioso; y al borde de la carcajada escucho que le dice a su novia: él piensa lo mismo que vos, que es como un tic nervioso (¿la novia también está metida en esto?); pero es raro, me dice; y bueno, pero yo también (le digo) tengo escalofríos de vez en cuando, pero no hago un escándalo de eso y nadie se entera, además, honestamente, no me parece nada relevante; se enojó por esto último y me cortó.
Siempre sentí que mi viejo deliberadamente deslizaba su atención a cosas que no eran yo, siempre, desde que tengo memoria. Y siempre me pareció un mecanismo jodido pero coherente, porque si te la comés, y tu concepción general del mundo es, o era, casi completamente opuesta a la de tu viejo, y él inventa un mecanismo para estar presente, y al mismo tiempo hacerse el boludo de algo que está ahí todo el tiempo (eso que no podés nombrar, eso que no está dicho, está más que ninguna otra cosa siempre en el medio, lo eclipsa todo y destruye lo espontáneo, lo destuye), se vuelve casi algo respetable, o al menos cotidiano. Pero cuando ya se dijo todo, y sobreviene el vértigo (feliz) de que todos los mecanismos que conocías para que el mundo se sostenga queden obsoletos, o inútiles, o se conviertan en una caricatura, ¿qué significa este residuo? (además de la realidad de que estoy lejos de dejar terapia, por supuesto). ¿Acaso soy yo el que sigue estando a la defensiva, el que pone distancia, el que desconfía? (bueno, yo nunca fuí demasiado brillante tampoco). Además tengo mis propios mecanismos siempre a mano, y me puedo escapar llegando a la obvia conclusión de que sencillamente me perdí esa nota del Paneta Urbano donde dice que no hay nada más cool que hacerse amigo del novio de su hijo gay.
MONICA: Hey, are you okay?
ROSS: My wife's a lesbian.
JOEY: Cool!!!
Siempre sentí que mi viejo deliberadamente deslizaba su atención a cosas que no eran yo, siempre, desde que tengo memoria. Y siempre me pareció un mecanismo jodido pero coherente, porque si te la comés, y tu concepción general del mundo es, o era, casi completamente opuesta a la de tu viejo, y él inventa un mecanismo para estar presente, y al mismo tiempo hacerse el boludo de algo que está ahí todo el tiempo (eso que no podés nombrar, eso que no está dicho, está más que ninguna otra cosa siempre en el medio, lo eclipsa todo y destruye lo espontáneo, lo destuye), se vuelve casi algo respetable, o al menos cotidiano. Pero cuando ya se dijo todo, y sobreviene el vértigo (feliz) de que todos los mecanismos que conocías para que el mundo se sostenga queden obsoletos, o inútiles, o se conviertan en una caricatura, ¿qué significa este residuo? (además de la realidad de que estoy lejos de dejar terapia, por supuesto). ¿Acaso soy yo el que sigue estando a la defensiva, el que pone distancia, el que desconfía? (bueno, yo nunca fuí demasiado brillante tampoco). Además tengo mis propios mecanismos siempre a mano, y me puedo escapar llegando a la obvia conclusión de que sencillamente me perdí esa nota del Paneta Urbano donde dice que no hay nada más cool que hacerse amigo del novio de su hijo gay.
MONICA: Hey, are you okay?
ROSS: My wife's a lesbian.
JOEY: Cool!!!
Wednesday, November 23, 2005
Tuesday, November 22, 2005
calor
Es muy probable que cuando L llegue a casa me encuentre cantándole nada oh oh oh nada personal al ventilador. Y tomando mi trago favorito: martini rosso mucho hielo soda y rodajitas de limón. Hace calor y mi playlist de soda es perfecta y bailar en calzoncillos en el living y hace calor y me prendo otro cigarrillo y 1990 y subo más el volumen y de mí sólo lo que ves conseguirás de mí.
Dulce criatura, nunca estás segura, ya no tengas dudas, soy tan dependiente de tu amor.
Dulce criatura, nunca estás segura, ya no tengas dudas, soy tan dependiente de tu amor.
Sunday, November 20, 2005
Saturday, November 19, 2005
omni
Tengo que admitir que mi jefa puede ser encantadora (aunque nos haya obligado a todos a escuchar Kraftwerk a las nueve de la mañana, repetidas veces), si le advierte a todos que mi discurso está lleno de pequeñas catársis domésticas, si entiende que mi compromiso con lo insignificante es auténtico y tiene carácter acumulativo, y si es la cómplice perfecta para detenerlo todo porque si nos acordamos de Voyagers! no se puede seguir hasta que aparezca la foto perfecta. Que apareció, finalmente, en churrascospuntonet. Epa. Pero yo no recordaba la serie por eso. De hecho no recuerdo más que un momento, tontísimo, en el que ellos dos encuentran a un Thomasalbaedison alteradísimo que había desarmado el reloj mágico pieza por pieza tratando de entender cómo hacer que su lamparita funcione. La cara de los tres. No tiene explicación (¿Por qué recuerdo eso, tan vívido, tan al alcance de la mano?) Me divierte mucho esa categoría de recuedos ¿idiotas? ¿televisivos? porque son automáticos y siempre los mismos. Como si hubiese abrochado en cada legajo mental una imágen en la portada (encuentro terriblemente poéticos los ficheros y archivos, y no es materia de debate). Entonces MacGyver se está tirando siempre por el mismo médano sentado en el mapa; estoy en el imperio de la pizza, con mi mamá, que me había llevado a pasar un día con ella en su trabajo, un mediodía comiendo siempre la pizza más rica del mundo; o la cámara alejándose de los Thundercats que se ríen en ronda después de un comentario de Snarf. No importa en realidad la naturaleza del fenómeno, para todos una carpeta con una imagen en la portada. Y me pregunto si es algo que sucede sin que me entere, si sucede in situ (ahora mismo me gustaría abrochar esto, mi gata en el balcón con las manitos para adentro los ojos entrecerrados con esta canción de Weezer en bermudas sin remera) o si sucede después. Como sea, mi abrochadora mental debe saber lo que hace, aunque yo no pueda hacer nada al respecto. Además sería una responsabilidad enorme, y viviría angustiado, y trataría de abrocharlo todo, y después clasificarlo, y me convertiría en un burócrata de los recuerdos. Inmediatamente inventaría la categoría "primera vez", porque es fácil (uno siempre sabe cuando es la primera vez de algo, y las primeras veces son infinitas y amistosas); pero después sentiría la necesidad de inventar la otra, la peor de todas, la de la "última vez", la más perversa (y viviría haciéndome esa pregunta "¿es esta la última vez que...?", y tendría miedo todo el tiempo, y no sabría por dónde empezar a abrochar, y no tendría fuerza para eso).
Ahora me acuerdo de ese episodio de Seinfield (brillante), en el que Elaine consigue lo que parecen ser las últimas cajas de las pastillas anticonceptivas que ella usa, y llega a la conclusión de que entonces le quedan una cantidad finita de polvos, como cartuchos en una pistola, y va a tener que organizarlos. Básicamente el infierno de las últimas veces. Pero Elaine es tan linda cuando baila (sí, tengo abrochado eso en la carpeta Seinfield. Sí, tengo una carpeta Seinfield. Cuando ella se queda encerrada en su departamento y Kramer le pasa fetas de comida por debajo de la puerta y ella tiene la radio prendida y se pone a bailar).
Pero lo que originó este post (un verdadero escapismo, en este blogabrochadero) es la frase que yo elegiría si pudiese recortarla y pegarla en la carpeta de "tres años de terapia con Myriam, mi primera sicóloga" (sé que lleva una "y" en el nombre, pero nunca sé dónde). Yo debía tener 19 años, y después de una sesión x, me disparó: "vos tenés que ser más puto" (y bueno, por hoy dejamos acá).
So... un nuevo superchurrasco para la galería (gomería), porque se murió de la manera más tonta, y apareció de casualidad, y porque a veces hay que saber limitarse a entender las cosas literalmente. Jon-Erik Hexum.
Green light, kid: We did it!
Ahora me acuerdo de ese episodio de Seinfield (brillante), en el que Elaine consigue lo que parecen ser las últimas cajas de las pastillas anticonceptivas que ella usa, y llega a la conclusión de que entonces le quedan una cantidad finita de polvos, como cartuchos en una pistola, y va a tener que organizarlos. Básicamente el infierno de las últimas veces. Pero Elaine es tan linda cuando baila (sí, tengo abrochado eso en la carpeta Seinfield. Sí, tengo una carpeta Seinfield. Cuando ella se queda encerrada en su departamento y Kramer le pasa fetas de comida por debajo de la puerta y ella tiene la radio prendida y se pone a bailar).
Pero lo que originó este post (un verdadero escapismo, en este blogabrochadero) es la frase que yo elegiría si pudiese recortarla y pegarla en la carpeta de "tres años de terapia con Myriam, mi primera sicóloga" (sé que lleva una "y" en el nombre, pero nunca sé dónde). Yo debía tener 19 años, y después de una sesión x, me disparó: "vos tenés que ser más puto" (y bueno, por hoy dejamos acá).
So... un nuevo superchurrasco para la galería (gomería), porque se murió de la manera más tonta, y apareció de casualidad, y porque a veces hay que saber limitarse a entender las cosas literalmente. Jon-Erik Hexum.

Green light, kid: We did it!
Thursday, November 17, 2005
Wednesday, November 16, 2005
tibio
Me gustaría haber coleccionado todos los boletos de colectivo esos que doblé milimétricamente así chiquititos. Estoy triste. Me duele la panza me duele el cuerpo me duele el espíritu. Puede ser algo en el aire. ¿Cuando llega el verano llega siempre el mismo verano? ¿Son siempre las mismas flores de jacarandá? ¿Hoy iba caminando al trabajo o de vuelta al colegio? En mi carpeta nro 3 negra voy a escribir Coiffeur, y voy a ir caminando por la calle con el walkman escuchando esta canción:
Coiffeur - Buenos Recuerdos
No sé como llegó Farrah. Apareció hoy por ahí. Creo que me gustaron las estrellitas como de italpark. Y se parece a mi mamá.
Coiffeur - Buenos Recuerdos

No sé como llegó Farrah. Apareció hoy por ahí. Creo que me gustaron las estrellitas como de italpark. Y se parece a mi mamá.
Sunday, November 13, 2005
panecillo
Este cuento es hermoso.
El amor es ciego - Boris Vian
(Gentileza y experimento de Ediciones Roto, en su versión ReadyToPrint. Puesta en página, ajuste y diseño de willito, mientras tomaba licuado de bananas, después de darse un baño, y se le ponía la piel de gallina cada vez que releía el final).
El amor es ciego - Boris Vian
(Gentileza y experimento de Ediciones Roto, en su versión ReadyToPrint. Puesta en página, ajuste y diseño de willito, mientras tomaba licuado de bananas, después de darse un baño, y se le ponía la piel de gallina cada vez que releía el final).
lips
Like a...
Science fiction, double feature.
Me desperté tardísimo, porque ayer madrugué (habían llegado los reyes magos, y ya no podía seguir en la cama, tenía que configurarlo, llenarlo de música, chequear que se habían comido todo el pasto y habían tomado agua). Y después me fuí paseandoipodeando al malba a comprar entradas para Rocky Horror. Un sábado muy gay friendly. Primero Homorama (Festival Queer) a la tardecita. Dijo Gus: Hernán Morán es mejor que Muscari (!). Dijo Lucas: Aceptable (tan él). Y yo dije (inmediatamente, no podía esperar): brillante. Y después en el Malba (Festival Diversa) la felicidad: The Rocky Horror Picture Show, en 16 (don´t dream it, be it). Gus cantaba y nos contaba que en Nueva York, cuando se estrenó la obra de teatro, en la entrada te daban una bolsita con arroz (para que tires al escenario en la boda de Janet y Brad) y un papel de diario para que te cubras la cabeza cuando ellos llegan al castillo y llueve (y toda la platea se cubría la cabeza con un papel de diario). Y ya habiamos perdido toda compostura y terminamos en palermo emborrachándonos con New Age (sí, es como tomar sidra, y es menemista, y ayer era perfecto).
At the late night, double feature, picture show.
Science fiction, double feature.

Me desperté tardísimo, porque ayer madrugué (habían llegado los reyes magos, y ya no podía seguir en la cama, tenía que configurarlo, llenarlo de música, chequear que se habían comido todo el pasto y habían tomado agua). Y después me fuí paseandoipodeando al malba a comprar entradas para Rocky Horror. Un sábado muy gay friendly. Primero Homorama (Festival Queer) a la tardecita. Dijo Gus: Hernán Morán es mejor que Muscari (!). Dijo Lucas: Aceptable (tan él). Y yo dije (inmediatamente, no podía esperar): brillante. Y después en el Malba (Festival Diversa) la felicidad: The Rocky Horror Picture Show, en 16 (don´t dream it, be it). Gus cantaba y nos contaba que en Nueva York, cuando se estrenó la obra de teatro, en la entrada te daban una bolsita con arroz (para que tires al escenario en la boda de Janet y Brad) y un papel de diario para que te cubras la cabeza cuando ellos llegan al castillo y llueve (y toda la platea se cubría la cabeza con un papel de diario). Y ya habiamos perdido toda compostura y terminamos en palermo emborrachándonos con New Age (sí, es como tomar sidra, y es menemista, y ayer era perfecto).
At the late night, double feature, picture show.
Saturday, November 12, 2005
Peeping Tom
I’m a shooting star leaping through the sky...

Eclipsadísimo por otras cosas, quiero dejarme eclipsar un rato por Sandy Claws (así lo bauticé). Ayer me lo trajo la cigüeña. Y tengo doce años de nuevo. Y me pasaría todo el día jugando BubbleBobble. Y la primer canción que voy a pasar (en este momento no puede ser otra) y que declaro el tema más cool y pertinente, es Don´t Stop Me Now, de Queen (una declaración de principios y un manifesto). Porque ayer, borrachín desde el afteroffice, torturé a un inocente Lucas más dos amigos con "ese tema, el más lindo de Freddie, que empieza con un pianito y después se pone todo punchipunchi y es para bailar y está buenísimo". No me salía y estaba al borde del colapso cuando apareció.
Like an atom bomb about to
Oh oh oh oh oh explode!

Eclipsadísimo por otras cosas, quiero dejarme eclipsar un rato por Sandy Claws (así lo bauticé). Ayer me lo trajo la cigüeña. Y tengo doce años de nuevo. Y me pasaría todo el día jugando BubbleBobble. Y la primer canción que voy a pasar (en este momento no puede ser otra) y que declaro el tema más cool y pertinente, es Don´t Stop Me Now, de Queen (una declaración de principios y un manifesto). Porque ayer, borrachín desde el afteroffice, torturé a un inocente Lucas más dos amigos con "ese tema, el más lindo de Freddie, que empieza con un pianito y después se pone todo punchipunchi y es para bailar y está buenísimo". No me salía y estaba al borde del colapso cuando apareció.
Like an atom bomb about to
Oh oh oh oh oh explode!
Sunday, November 06, 2005
tick tick tock
Primero se enfermó Lucas. Mal. Y estaba como fascinado. Y Lucas no es de esos (como yo) que podemos escuchar el mismo tema todo el tiempo en todos lados. Pero como a mí Abba nunca me gustó, pensé que iba a pemanecer inmune. Hasta que ayer me bajé la presentación en los MtvEma2005... Poderosísima. Y ahora voy por la vida yo también repitiendo alienado: time goes by... so slowly... time goes by... so slowly... y así. Y que el host haya dicho "It was very brave of MTV to start the show with a transvestite" es tonto pero adorable.
Y así fuimos cantando al Cervantes a ver En Auto de Veronese (¿por qué en esa esquina del edificio donde hay como una callecita que entra por Córdoba y sale por Libertad no ponen mesas y faroles y hacen el bar más lindo de buenos aires?). Nos encontramos con Gus, nos reimos "con" Lucas de su ridícula obsesión con la puntualidad (que btw últimamente nos hace llegar una hora antes a todos lados, a los dos), terminamos nuestro café y entramos en la sala. La obra nunca empezó 9:30, que se sepa. Y básicamente... no estuvo buena. Yo de todos modos soy incondicional de Veronese y sus textos y sus personajes y sus puestas. Pero fuí a recibir una golpiza y salí intacto. Yo (porque soy un jodido) la culpo de todo a María Figueras, que siempre parece estar actuando en otra obra (que tal vez está buenísima, pero no es la obra que estamos viendo... como si se hubiese quedado atorada en una obra de Bartís de los noventa). Como sea, Gus, L y yo también estábamos en tres obras distintas: Gus buscando el guiño cómplice de otro espectador que le confirme que sí, que hacía mucho calor en la sala; L atormentado por el ruido del abrir y cerrar de la cajita de tictacs de la señora sentada junto a mí, y que yo jamás escuché porque toda mi atención estaba puesta en el labio de Leonor Manso, que no paró de temblar afectadísimo toda (toda) la obra. Pero está bien, hay que ir al teatro siempre, a ver todo, porque después se levanta la obra y ya (nunca, nunca me voy a perdonar no haber ido a ver La Escala Humana, nunca). Si en vez de la Figueras hubiese sido Julieta Vallina, podría haber sido la obra del año (pero repito, soy un jodido).
Y después caminar hasta tenedorlibre (ojo, no koreano, tipo Grantz, como dice Muscari), al cumpleaños de F, lleno de celebridades que por política de este blop nunca serán nombradas (y por advertencia de L: tené mucho cuidado con lo que vas a bloguear, el mundo es muy chiquito... i know).
Lucas acaba de secar prolijamente un caño con el secador de pelo (como dicen las instrucciones que debe hacerse) dispuesto a sellar once and for all la gotera que él sigue sosteniendo le hace la vida imposible. Yo hice mi parte: sostuve la linterna. Termina su trabajo y le digo (sólo para molestarlo) ¿me hacés un pete, ahora? Me mira preocupado y me responde: ¿podés esperar a que se seque la poxilina?
Y así fuimos cantando al Cervantes a ver En Auto de Veronese (¿por qué en esa esquina del edificio donde hay como una callecita que entra por Córdoba y sale por Libertad no ponen mesas y faroles y hacen el bar más lindo de buenos aires?). Nos encontramos con Gus, nos reimos "con" Lucas de su ridícula obsesión con la puntualidad (que btw últimamente nos hace llegar una hora antes a todos lados, a los dos), terminamos nuestro café y entramos en la sala. La obra nunca empezó 9:30, que se sepa. Y básicamente... no estuvo buena. Yo de todos modos soy incondicional de Veronese y sus textos y sus personajes y sus puestas. Pero fuí a recibir una golpiza y salí intacto. Yo (porque soy un jodido) la culpo de todo a María Figueras, que siempre parece estar actuando en otra obra (que tal vez está buenísima, pero no es la obra que estamos viendo... como si se hubiese quedado atorada en una obra de Bartís de los noventa). Como sea, Gus, L y yo también estábamos en tres obras distintas: Gus buscando el guiño cómplice de otro espectador que le confirme que sí, que hacía mucho calor en la sala; L atormentado por el ruido del abrir y cerrar de la cajita de tictacs de la señora sentada junto a mí, y que yo jamás escuché porque toda mi atención estaba puesta en el labio de Leonor Manso, que no paró de temblar afectadísimo toda (toda) la obra. Pero está bien, hay que ir al teatro siempre, a ver todo, porque después se levanta la obra y ya (nunca, nunca me voy a perdonar no haber ido a ver La Escala Humana, nunca). Si en vez de la Figueras hubiese sido Julieta Vallina, podría haber sido la obra del año (pero repito, soy un jodido).
Y después caminar hasta tenedorlibre (ojo, no koreano, tipo Grantz, como dice Muscari), al cumpleaños de F, lleno de celebridades que por política de este blop nunca serán nombradas (y por advertencia de L: tené mucho cuidado con lo que vas a bloguear, el mundo es muy chiquito... i know).
Lucas acaba de secar prolijamente un caño con el secador de pelo (como dicen las instrucciones que debe hacerse) dispuesto a sellar once and for all la gotera que él sigue sosteniendo le hace la vida imposible. Yo hice mi parte: sostuve la linterna. Termina su trabajo y le digo (sólo para molestarlo) ¿me hacés un pete, ahora? Me mira preocupado y me responde: ¿podés esperar a que se seque la poxilina?
Saturday, November 05, 2005
tortuga
El aire se respira
huele a tierra mojá
Necesitaba un poco de esto para celebrar que ya pasó la tormenta: un montón de amarettis, mate hasta que esté lavadísimo y dulce, Men Señará de Bebe loopeando (para bailar en el living, colgar la ropa, subir el volumen y darse un baño). Tendría que haber sospechado de alguien que no fuma, odia las aceitunas, no toma café y duerme con medias de lana. Pero aprendí a descontaminar las pizzas (más aceitunas para mí, al fin y al cabo). Aprendí a aceptar a mitad de la noche, cuando busco con los pies las zonas donde las sábanas están más frescas, que puedo encontrarme con algo que pincha (a veces sus medias, a veces su gata Medea, porque cada uno resuelve su edipo como puede). Que tengo que decirle que disfruto de su café, y disimular que lo digo porque sé que ensaya y se preocupa y probó todos los sistemas y fórmulas y dispositivos y aún así... pero me mira cuando tomo el primer sorbo y es tan rico. Porque es solamente para mí. Y aprendí a renunciar al cigarrillo más rico del mundo (tengo prohibido fumar en la habitación, y más prohibido fumar en la cama, una crueldad). Pero él es mío mío mío.
Men señará a ver sus ojos
aunque él no esté
huele a tierra mojá
Necesitaba un poco de esto para celebrar que ya pasó la tormenta: un montón de amarettis, mate hasta que esté lavadísimo y dulce, Men Señará de Bebe loopeando (para bailar en el living, colgar la ropa, subir el volumen y darse un baño). Tendría que haber sospechado de alguien que no fuma, odia las aceitunas, no toma café y duerme con medias de lana. Pero aprendí a descontaminar las pizzas (más aceitunas para mí, al fin y al cabo). Aprendí a aceptar a mitad de la noche, cuando busco con los pies las zonas donde las sábanas están más frescas, que puedo encontrarme con algo que pincha (a veces sus medias, a veces su gata Medea, porque cada uno resuelve su edipo como puede). Que tengo que decirle que disfruto de su café, y disimular que lo digo porque sé que ensaya y se preocupa y probó todos los sistemas y fórmulas y dispositivos y aún así... pero me mira cuando tomo el primer sorbo y es tan rico. Porque es solamente para mí. Y aprendí a renunciar al cigarrillo más rico del mundo (tengo prohibido fumar en la habitación, y más prohibido fumar en la cama, una crueldad). Pero él es mío mío mío.
Men señará a ver sus ojos
aunque él no esté
Thursday, November 03, 2005
caranchismo

De "María julia, la carancha (una dama sin límites)": Me dicen Julita, me dicen Yulita, me dicen Yulí, Mari Yuli, Mariyú, Yuyiyuli, boludita, putita de mierda, hija de mil putas.
Urdapilleta+Tortonese+Batato
Sunday, October 30, 2005
bistec

Debe ser porque ayer fuimos a ver Al Este del Paraíso al Malba (Una amiga de Lucas disparaba los subtítulos y nos hizo pasar a la cabina y vinos la peli desde ahí y estuvo buenísimo) y estaba James Dean y ya (tan tan lindo, él, tan tan churrasco). Y porque me encanta inventar categorías de cosas. Caprichosas y deformes. Y así apareció (junto con la primavera) el *churrasco*. Para divertirme mientras trabajo (¿vieron el churrasco que está en la recepción?). Y mis compañeras me acusan de encontrar churrascos en todos lados, todo el tiempo (la única pregunta válida en todos los casos es la misma: ¿le doy o no? si la respuesta es sí, estamos frente a un churrasco; y me divierto tanto cuando me doy cuenta que sí, como cuando me doy cuenta que no). A priori nunca se sabe, porque puede ser cualquier cosa, cualquier gesto, pero siempre es un sí o un no. La vida es así, le das o no le das; no hay nada en el medio. Pero para que me entiendan tuve que inventarme tres subcategorías: al *churrasquín* le das porque algo te conmovió (generalmente que sea tan tonto), al *churrasco* le das porque sí (u just know it), y en el *superchurrasco* te sambullís, de cabeza (bueno, eso).
Así que inauguro lo que se podría convertir en una nueva sección (la carnicería de willito, sin sutilezas) con un pic que encontré mucho antes de que el mundo se llenara de churrascos. Un Marlon Brando que es un completo y absoluto superchurrasco (aunque hayamos visto el E true hollywood story y sepamos que termina gordopobreyabandonado). En una subcategoría que sería *superchurrascos through history*, estaría él. (Lucas me dice -pero tiene cara de tonto!, y yo le digo que no es superchurrasco a pesar de eso, si no exactamente POR eso).
Btw L adoptó la (él cree que muy simpática) costumbre de golpearme en la cabeza, cada vez que me habla y no lo escucho. Hace un rato caminabamos y me dice algo, y vuelvo de donde sea que haya estado y le digo -qué? y lo miro. Y me golpea. Y me empiezo a reir y le digo -sabé que lo que me decís no siempre es muy interesante (Lucasmm), y se enoja (!). A la media hora, ya en el super, me dice que lo que me había preguntado era si el paquete de papel higiénico que abrí ayer, era de 6 rollos o de 4. (!!) ¿Cómo podría recordar eso? (!?) Le respondo, de todos modos, que no tenía le menor idea, pero que si le servía de algo, el papel tiene unos perritos azules muy cuties. Y me golpeó con la caja del dvd.
Saturday, October 29, 2005
sandy claws
Lo mejor de lo mejor es que los Biznikes Nevados van a ser para siempre más ricos. Como un hey! que me alegra el día todos los días. Ahí para hacerme cosquillas. Ahí para jugar. Para inventarle nombres todo el tiempo. Para molestarlo y retarlo y que me quiera. Para que se ría de mí y me haga reir. Para que me conmueva y se quede. Para que llegue tarde a todos lados. Para escribirle esto ahora que está lejos y hacerle lero lero. Para que siempre quede algo pendiente. Para que me diga que el stand de ahumados en el aeropuerto le hace pensar en mí. Para que me diga que vaya al campo a sacarle 360 fotos a una vaca desde 360 ángulos distintos y haga con eso una instalación (alguna vez voy a hacer el vaca-o-rama y te lo voy a dedicar). Para que me cuente de Haring y Woody Allen y sus primeras pajitas y nunca me canse. Para inventar nuevas categorías de infinito. Para imaginarme su corbata amarilla. Para imaginarlo perturbado por la portada del gato con botas y la meta referencia. Para desencontrarnos y encontrarnos. Muchas muchas veces más.
This is a thing called a present
The whole thing starts with a box
(A box? Is it steel?)
(Are there locks?)
(Is it filled with a pox?)
(A pox. How delightful, a pox)
If you please
Just a box with bright-colored paper
And the whole thing's topped with a bow
(A bow? But why? How ugly. What's in it? What's in it?)
That's the point of the thing, not to know
This is a thing called a present
The whole thing starts with a box
(A box? Is it steel?)
(Are there locks?)
(Is it filled with a pox?)
(A pox. How delightful, a pox)
If you please
Just a box with bright-colored paper
And the whole thing's topped with a bow
(A bow? But why? How ugly. What's in it? What's in it?)
That's the point of the thing, not to know
Tuesday, October 25, 2005
red boots
Saber que estoy en el lugar justo, en el momento indicado, con la persona correcta, es ir al videoclub, como fuimos tantas veces, escuchar la selección de lo posible que hace L, pasearme sin prestarle demasiada atención, sabiendo que hay siempre una sola posibilidad que nos encuentra (y no al revés), y descubrir en el estante de abajo, en un rincón, Footloose en dvd. Agarrar la cajita, mostrársela a L, sonreir, y ver a L sonreir. Y es perfecto.
(Como lo cantaba Victoria Abril).
Todo lo demás es historia. Llegar a casa rápido. Tirarnos en calzoncillos en la cama. Piel de gallina en los títulos. Entender que es grandioso. Decirle a L todo lo que va a pasar antes de que pase. Ariel hermosísima. Ren con su corbata David Bowie. Dancing In The Sheets. Hey Hey! What's this I see? I thought this was a party. LET'S DANCE!
(Como lo cantaba Victoria Abril).
Todo lo demás es historia. Llegar a casa rápido. Tirarnos en calzoncillos en la cama. Piel de gallina en los títulos. Entender que es grandioso. Decirle a L todo lo que va a pasar antes de que pase. Ariel hermosísima. Ren con su corbata David Bowie. Dancing In The Sheets. Hey Hey! What's this I see? I thought this was a party. LET'S DANCE!
Sunday, October 23, 2005
enanos
Si no me hubiese lastimado tanto como me lastimó (creo que por todos lados, pero especialmente el espíritu), al extremo de salir y no poder articular palabra, la obra que ví ayer, podría decir que tuve la suerte de ver la obra del año. Pero cuando las cosas me lastiman así, sólo puedo pensar que se trata de un golpe bajo. Y eso no tiene excusa, nunca. Sacudir no es lo mismo que lastimar, y esta obra duele. Dejar el espacio para que un espectador (tal vez sensible) imagine o intuya las más oscuras posibilidades, me parece respetable y noble; lo otro me parece perverso.
Sin embargo, y si consigo que lo áspero no lo eclipse todo, esta obra tiene todo lo que necesita para generar una fuerza terriblemente precisa. El problema no es que le falte algo. El problema es que le sobra.
Las actuaciones me parecieron desparejas, pero la madre y la hija rica, son impecables. Y marito está claro que no, pero cuando se trata de fetiches...
Tolcachir decididamente no es sólo una cara bonita (escribí todo lo anterior sólo para escribir esto). "La omisión de la familia Coleman", en Timbre 4.
Agrego (destaco) que Lucas casi se descostilló de la risa durante la función (Y bueno, sostiene, es humor negro), así que si a mí no me pasó lo mismo, entiendo que la obra me tocó demasiado de cerca, ahí donde no está bueno.
Para otra mirada sobre el fenómeno Tolcachir, chequear el blop de Yukio (al que le dejo saludos muchos).
(¿Por qué durante el almuerzo en casa de la familia de L, tuve que enterarme del estado (crítico) de la flora intestinal de mi suegro?)
Sin embargo, y si consigo que lo áspero no lo eclipse todo, esta obra tiene todo lo que necesita para generar una fuerza terriblemente precisa. El problema no es que le falte algo. El problema es que le sobra.
Las actuaciones me parecieron desparejas, pero la madre y la hija rica, son impecables. Y marito está claro que no, pero cuando se trata de fetiches...
Tolcachir decididamente no es sólo una cara bonita (escribí todo lo anterior sólo para escribir esto). "La omisión de la familia Coleman", en Timbre 4.
Agrego (destaco) que Lucas casi se descostilló de la risa durante la función (Y bueno, sostiene, es humor negro), así que si a mí no me pasó lo mismo, entiendo que la obra me tocó demasiado de cerca, ahí donde no está bueno.
Para otra mirada sobre el fenómeno Tolcachir, chequear el blop de Yukio (al que le dejo saludos muchos).
(¿Por qué durante el almuerzo en casa de la familia de L, tuve que enterarme del estado (crítico) de la flora intestinal de mi suegro?)
Saturday, October 22, 2005
burrismo
Me compré la billetera más linda del mundo.

Es de Paul Frank, y la encontré a dos cuadras de casa, en Gascón y Gorriti. Y salió el sol. Y lo quiero a Lucas, aunque no tengo pistas del por qué.

Es de Paul Frank, y la encontré a dos cuadras de casa, en Gascón y Gorriti. Y salió el sol. Y lo quiero a Lucas, aunque no tengo pistas del por qué.
endorphins
Desde el momento en que caés en la cuenta de que existe siempre un "continuará..." tácito al final, y que quien quiera que afirme que la vida no es un disco de Miranda bien podría estar equivocado, una discución como la de ayer con L se vuelve maravillosamente pertinente. Y mucho más si te atrevés a decirme, como quien no quiere la cosa, dejá, hacé como que no dije nada, no importa. Porque entonces esto acaba de empezar. ¿Cómo voy a hacer como si no hubieras dicho nada? Y más importante: ¿Cómo no me va a importar? Maldita la acústica de ese maldito bar de Palermo que me dejó afónico. Pero cuando me entusiasmo no puedo parar. El placer de disfrutar de lo que no hace falta decir no puede contra el placer de encontrar las palabras justas para decirlo. Y no me puedo enojar conmigo por necesitar escucharmelo decir, porque se siente grandioso.
Tal vez sea cierto, como dice Burroughs, que estamos todos irremediablemente enfermos del virus del leguaje*, pero sé que es cierto lo que dice Barthes: La palabra es hermosa.
Parece que la película de mi vida la va a dirigir Mike Nichols (Closer, The Birdcage, Working Girl). Y yo que pensaba contratar al director de Legally Blond...
Elle: I just don't think that Brooke could've done this. Exercise gives you endorphins. Endorphins make you happy. Happy people just don't kill their husbands, they just don't.
*La palabra puede ser claramente definida como un virus: se trata de un organismo que no posee ninguna otra función interna que la de reproducirse a sí mismo.
Tal vez sea cierto, como dice Burroughs, que estamos todos irremediablemente enfermos del virus del leguaje*, pero sé que es cierto lo que dice Barthes: La palabra es hermosa.
Parece que la película de mi vida la va a dirigir Mike Nichols (Closer, The Birdcage, Working Girl). Y yo que pensaba contratar al director de Legally Blond...
Elle: I just don't think that Brooke could've done this. Exercise gives you endorphins. Endorphins make you happy. Happy people just don't kill their husbands, they just don't.
*La palabra puede ser claramente definida como un virus: se trata de un organismo que no posee ninguna otra función interna que la de reproducirse a sí mismo.
Thursday, October 20, 2005
Wednesday, October 19, 2005
at 26?

Hoy tuve dos highlights simpáticos (o pequeños hallazgos que por un instante).
Uno. Del prólogo del libro que estoy leyendo (La geometría del amor). Parece que Cheever, cuando daba clases, finalizaba su programa con "un ejercicio que nunca falla": redactar una carta de amor como si se la estuviera escribiendo desde un edificio en llamas (!). Dos. De una TeenVogue (porque sí, deliciosamente, eso es materia prima para mi trabajo, además de encontrar la fotito de twiggy), en una nota titulada "embrace your inner geek", una frase que bien se podría convertir en el slogan para toda una generación (sin que necesariamente alguien se tenga que sentir identificado con ella): "don´t be afraid to write me a post-it note that says I LOVE YOU and leave it on my ipod" (!!). Es demasiado larga para estampa de remera, pero lo pensé...
Y aunque desde que existe CopyRight? el mundo no va a ser el mismo (epa) colgué la canción más linda de uno de los discos más lindos que tuve alguna vez jamás.
Bran Van 3000 - Drinking In LA
(Tendría que existir una palabra que señale directamente a esa sensación particular y única de salir feliz de terapia).
Monday, October 17, 2005
dark room
De nuevo caminar por la calle, y hablar... Y tratando de pretender que hay algo de conciencia social en mí, le pregunto a Lucas: A quién vas a votar? Y me responde: A Moria o a Zulma. Ah! ¿Porque son "artistas"? le pregunto. Y me responde que sí. Y yo le digo que no sé, que probablemente voy a elegir la boleta mejor diseñada.
Al rato Lucas pareció recapacitar, y me dijo: creo que en realidad lo voy a votar a Coscia, el director del incaa... Lo miré serio y le pregunté si no era un corrupto (solamente para usar esa palabra, de señor panzón y portafolios), y me dijo que cree que no. Y por un instante creí recapacitar yo también, y casi digo que la iba a votar a la gorda, pero me conozco, y si la boleta de su partido no es la más linda, no la voy a elegir, así que permanecí en silencio.
Desde que tengo un *coso* de neopren azul en el codo derecho, me siento terriblemente sexy.
Al rato Lucas pareció recapacitar, y me dijo: creo que en realidad lo voy a votar a Coscia, el director del incaa... Lo miré serio y le pregunté si no era un corrupto (solamente para usar esa palabra, de señor panzón y portafolios), y me dijo que cree que no. Y por un instante creí recapacitar yo también, y casi digo que la iba a votar a la gorda, pero me conozco, y si la boleta de su partido no es la más linda, no la voy a elegir, así que permanecí en silencio.
Desde que tengo un *coso* de neopren azul en el codo derecho, me siento terriblemente sexy.
Sunday, October 16, 2005
wonder years
"Growing up happens in a heartbeat. One day you're in diapers; the next day you're gone. But the memories of childhood stay with you for the long haul"

Kevin Arnold + Winnie Cooper

Kevin Arnold + Winnie Cooper
Saturday, October 15, 2005
Friday, October 14, 2005
scouting
Sigo flotando... pero menos que ayer. La anestesia total es fabulosa. Pero necesito más que paseos a nuevas formas de percepción. Necesito vacaciones. De esas de verdad. Y mi pastafrolismo me hace pensar en el Huechulafquen. Volvería a poner la carpa en el mismo lugar. Con L. Pero L esta vez quiere playa... Así que no tengo opciones, pensé, será La Pedrera. No sé porque un lugar que no conozco se me ocurre de pronto la única opción. Y estaba contento con mi chiche nuevo, La Pedrera esto, La Pedrera aquello. Hasta que mi viejo me dijo: Super fashion, super bajo perfil, te va a encantar... (Juraría que usó las mismas palabras para describir al restorán Rosa Negra de Martinez). Así que me puse a googlear y descubrí que La Pedrera tiene página (horrible) y hasta un botón que dice "movida". Pero yo quiero pastafrola, no Ku. Quiero mate y bizcochos y ipodear y "dormir la siesta" y libro y largas caminatas y que se ponga el sol y "dormir la siesta" y luciérnagas y fogata en la playa y un montón de estrellas y Lucas y "dormir la siesta". Así que adiós La Pedrera... Será Valizas y Cabo Polonio.
Tuesday, October 11, 2005
zoo
Básicamente, la vida es un rinoceronte. Con un sombrero mejicano. Como de mariachi.
Hace unos días (como en érase una vez...) volvíamos con L del super, caminando por Honduras. Estabamos por llegar al videoclub, cuando me llamó la atención un cartel que pusieron sobre la entrada, donde se ve claramente a un animal corpulento, sentado. Intrigado por la naturaleza de este animal, le pregunto a L: es un elefante, o un hipopótamo? L, sin mirar hacia arriba, sin mirarme, impasible, me responde a mí (diseñador gráfico): es un rinoceronte. Es entonces cuando levanto un poco más la vista hasta ese punto que le da sentido a todo el cartel (¿punto de tensión?). Un cuerno, uno solo, que nace en algún lugar de la cara del animal, agujereando el sombrero que le cubre la misma, se asoma casi en el centro del afiche. Un pequeño bochorno doméstico del montón.
Ayer a la noche, volvíamos del cine, caminando por Honduras. Estábamos por llegar al videoclub, cuando me llamó la atención un cartel que pusieron sobre la entrada... me pongo serio y le pregunto a L: es un elefante, o un hipopótamo? L, sin mirar hacia arriba, sin mirarme, impasible, me responde: Es una mezcla de los dos, un híbrido. Ah, le dije yo, eso pensé. Y seguimos caminando en silencio hasta casa.
Esa noche, a mitad de la noche, en la cama, iluminado, le digo a L (con el tono de voz que uno emplea para comunicar grades hallazgos): Yo soy Wallace, y vos sos Gromit! Te das cuenta? No obtengo ninguna respuesta, así que me acerco un poco más, y le susurro: ¿Estás dormido? Y sin abrir los ojos, impasible, me responde: Sí.
Hace unos días (como en érase una vez...) volvíamos con L del super, caminando por Honduras. Estabamos por llegar al videoclub, cuando me llamó la atención un cartel que pusieron sobre la entrada, donde se ve claramente a un animal corpulento, sentado. Intrigado por la naturaleza de este animal, le pregunto a L: es un elefante, o un hipopótamo? L, sin mirar hacia arriba, sin mirarme, impasible, me responde a mí (diseñador gráfico): es un rinoceronte. Es entonces cuando levanto un poco más la vista hasta ese punto que le da sentido a todo el cartel (¿punto de tensión?). Un cuerno, uno solo, que nace en algún lugar de la cara del animal, agujereando el sombrero que le cubre la misma, se asoma casi en el centro del afiche. Un pequeño bochorno doméstico del montón.
Ayer a la noche, volvíamos del cine, caminando por Honduras. Estábamos por llegar al videoclub, cuando me llamó la atención un cartel que pusieron sobre la entrada... me pongo serio y le pregunto a L: es un elefante, o un hipopótamo? L, sin mirar hacia arriba, sin mirarme, impasible, me responde: Es una mezcla de los dos, un híbrido. Ah, le dije yo, eso pensé. Y seguimos caminando en silencio hasta casa.
Esa noche, a mitad de la noche, en la cama, iluminado, le digo a L (con el tono de voz que uno emplea para comunicar grades hallazgos): Yo soy Wallace, y vos sos Gromit! Te das cuenta? No obtengo ninguna respuesta, así que me acerco un poco más, y le susurro: ¿Estás dormido? Y sin abrir los ojos, impasible, me responde: Sí.
Monday, October 10, 2005
estornudo

w i l l i t o dice - cómo te trata el feriado? - estoy escuchando música... unos conciertos de piano de horowits.. - yo también, café catuba - y en la mitad de una sernata de mozart... se escucha un estornudo! - epa - fue grabado en vivo en el carnegui hall, en 1966, te imaginas poder decir "ese estornudo es mio!" - un estornudo célebre... quién habrá sido? - no sep. - 1966... marilyn monroe? - jajaja es cierto... yo pensé que el estornudo era de un anónimo... - hay que dilucidar el enigma... - pero mira si era golda meyer? - es un lindo conflicto para una peli de woody allen - siii "misterioso estornudo en el carnegie hall" - totalmente - Sabes, no sé si escucho esa versión de la serenata de mozart porque me gusta o por el estornudo!
Así que salgo de paseo a comprar entradas para Wallace y Gromit (muy divertida Tiempo De Valientes, impecable y bajón El Aura, basta de cine argentino), un día perfecto para ipodear por palermo. Shuffle. El punto es que soy un confeso incondicional de Alanis Morissette, sin llegar a extremos incómodos, porque allá en el 95 Jagged Little Pill estaba bueno, y la fuí a ver a obras y era joven y entusiasta y el baterista era hermoso. Y después se transformó un poco en Celine Dion, pero canta tan lindo... Y este tema de Cole Porter es lindo también:
Alanis Morissette - Let´s Do It (Let´s fall in love)
Saturday, October 08, 2005
gotismo

Algunos de los cuentos más hermosos que leí en mi vida los escribió O´Henry (1862-1910). Que resulta muy difícil de googlear porque todos tenemos en algún lugar algún pariente Henry, lo sepamos o no. Y fue cuando finalmente me convencí de esto que descubrí que su verdadero nombre era William S. Porter. Y que alguna vez le escribió a su hija, desde el campo:
"Aquí es verano, las abejas están floridas, las flores cantan, los pájaros hacen su miel... ¿Para cuándo las Pascuas y los huevos de conejos? Pero sin duda tú has aprendido en la escuela que los conejos no ponen huevos y que los huevos crecen sobre los arbustos."
Y si primero creí que su cuento en la antología del humor negro de Breton era todo, todavía me faltaban sus Cuentos de Nueva York, y su novela Coles Y Reyes. De la que voy a copiar un párrafo, escrito casi antes del cine...
"Escena: Los límites de las tierras de un latifundista en un país tropical. Un indio anciano de rostro caoba limpia las hierbas que invaden una tumba junto a un campo de mangles. Se levanta y camina lentamente hacia una huerta sombreada por el breve y rápido crepúsculo. A la salida de la huerta se ve a un hombre de recia contextura, de gesto bondadoso y amable, acompañado por una mujer de recia y clásica belleza. Cuando el anciano indio llega junto a ellos, el alto señor deja caer algunas monedas en su mano. Con la impávida altivez de su raza, el cuidador de la tumba las acepta como un derecho y se marcha. La pareja que se encuentra junto a la huerta se interna por el sombrío sendero, caminando muy juntos, muy juntos..., pues, al fin y al cabo, ¿qué es el mundo, en el mejor de los casos, si no un pequeño cuadro cinematográfico en que una pareja camina unida?"
¿Por qué estoy en mi casa ahora si la primavera está ahí afuera? Lucas. Que no descansa. Hace una semana descubrió una pérdida en el calefón. Y puso un balde. Azul. Sin embargo no hay cada vez más agua, como él se empecina en hacerme creer, en el balde. De hecho, la "gota" que pende del caño, se parece mucho a la gota que él me hizo ver la semana pasada... ¿Será acaso la misma gota, que decidió anidar en nuestro caño? Lucas sostiene que no. Que a una gota la sucede otra gota, y así. Y sucedió lo que más me temía: El plomero no vino el lunes, ni el miércoles... Y Lucas se fue a su curso, y heme aquí. Balcón, pajaritos y mate. Y el plomero en la terraza de El Diamante tomándose un martini. Yo en su lugar haría lo mismo.
Tuesday, October 04, 2005
kumba
Fundido encadenado... Y todo es sepia (un recurso cliché, el primero, pero voy a evitar contarlos). Flashback. Por culpa del blop de Snoopy (a quien aprovecho para mandarle afectuosos saludos muchos). Me gustaría hacer un invetario de momentos en mi vida que marcaron un antes y un después, pero aunque no me falta entusiasmo, tengo poco tiempo (Lucas llega a las once de dictar su curso, la cena está sobre el fuego). Así que me voy a concentrar en uno. Hace ya varios años. En realidad hace muchos años, cuando un día caés en la cuenta de que te gustan los nenes, no las nenas (a los trece?); empieza una cuenta regresiva. En algún momento iba a tener que comunicarle esto a mis viejos. Siempre se me ocurre la misma metáfora (obvia): me acabo de subir a una montaña rusa, estoy sentado en el carrito, bajaron el dispositivo de seguridad, se empieza a mover, y escucho el ruido del tren que se engancha a la cadena que lo va a subir hasta la parte más alta, tracatracatraca, lento, y ya no te podés bajar, y no hay lugar a donde ir excepto arriba, y esa sensación en el estómago, y cerrás los ojos pero el ruido está siempre, tracatracatraca, y no sabés cuando vas a llegar arriba de todo, lo único que sabés es que todavía no llegaste, tracatracatraca. El ruido de toda mi adolescencia, tracatracatraca. Y pasan un montón de cosas mientras tanto. Pero cada vez estás más alto, y un día ese es el único ruido que escuchás. Entonces un fin de semana decidís ir con tu viejo a Santa Fe, solos, a ver a la familia. Y pensás todo el tiempo en M. Y necesitás flatenear todos los layers. Y mi abuela dice en la mesa que la idea de dos homosexuales adoptando un hijo le da asco. Tracatracatracatracatraca. Y te despedís de todos, sin estómago porque se contrajo tanto que ya no está, y te subís al auto. Solos, mi viejo y yo, 500 kilómetros de ruta para los dos. Pero no hay ruta no hay auto no hay mate no hay radio. Tracatracatracatracatraca. Se hizo de noche. En el medio de la nada. Faltan dos horas de viaje. Y no sé cuál es el instante exacto, y cerrás los ojos, y escuchás el último trac, y lo que sigue es el silencio más profundo que escuchaste en tu vida. Estás arriba de todo, en un instante eterno.
No sé exactamente qué fue lo que dije, o cómo. Pero de pronto hay auto y ruta y mate y radio y estómago. Y está mi viejo. Y no chocamos (a 170 km por hora, no es un detalle menor). Y está M en Buenos Aires, pero ya no hace falta hablar de M porque ya está todo dicho. Y le digo a mi viejo que por favor me diga algo. Y me dice:
-¿Estás seguro de que todo esto no es nada más que un esnobismo?
Me encantan las montañas rusas.
No sé exactamente qué fue lo que dije, o cómo. Pero de pronto hay auto y ruta y mate y radio y estómago. Y está mi viejo. Y no chocamos (a 170 km por hora, no es un detalle menor). Y está M en Buenos Aires, pero ya no hace falta hablar de M porque ya está todo dicho. Y le digo a mi viejo que por favor me diga algo. Y me dice:
-¿Estás seguro de que todo esto no es nada más que un esnobismo?
Me encantan las montañas rusas.
Monday, October 03, 2005
data
...por otro lado, debo ser el tipeador más veloz en la categoría "dos dedos" - jaja no puedo creer que escribas con dos dedos. - jajaja, estaba pensando en eso.... y tan incapaz soy de usar todos mis dedos, que cuando conozco gente que usa toda la mano, me asombro, y esa persona automáticamente mejora su imagen para mi, porque me parece un gran logro... - jajja yo uso todos los dedos creo... - wow - hmm me parece que hay alguno que no. - si? no estás en la categoría "cinco dedos"? - naaaaa mi imagen con vos no necesita a todos los dedos para mejorar!!!!! ya superamos esa etapa.... - cómo se hace para aprender a tipear? - no se, de a un dedo "extra" por vez. - si? te lo pregunto en serio - empezá con algo facil.. el pulgar para la barra de espacio.. - Lucas me dice que sencillamente lo haga, que yo ya sé donde están las letras... que deje de mirar el teclado y lo haga (si se tratase de andar en bicicleta, me arrojaría por la pendiente el muy sorete) - jajajajajaja pero no es descabellado...tenes que relajarte... - asdfghjklñ - pulgar para la barra de espacio. - estoy practicando - practique. - qué hago? me pongo a copiar un texto sin mirar el teclado? lo que pasa es que no puedo dar el salto.....no podría soportar escribir más lento de lo que escribo, tons, no practicaría en mis charlas de msn... y si no soy disciplinado, nunca va a funcionar - yo te tengo paciencia. dale a la barra de espacio con el pulgar.. - asdfghjklñlññklñkjsahñ no me sale!!!!!! - paciecia mi joven padowan... may the force be with u. - pero la orden que le envía mi cerebro a mi pulgar se desvía en algún punto y le llega a cualquier otro dedo o a todos... - jaja - te conté alguna vez de mi experiencia yedi? uh! pero me tengo que ir! debo partir! - es verdad... el pulgar me tiembla asustado... y entra en panicattack y el menor movimiento lo altera y no lo resiste y aprieta la barra. te vas? asdfghjklñ asdfghjklñ - sip. - y el enter? con qué dedo? - con el chiquito de la derecha. - el meñique?! el meñique no puede tener semejante responsabilidad! - tenes que delegar!!! no seas tan control freak! el meñique puede!! - u don´t know my meñique... pobrecito... useless. lo conservo porque las manos con menos de cinco dedos no son felices... - hay gente que lo entrena en la oreja y/o la nariz... pero queda taaan feo. tenele fe. Tu meñique puede! eh! dale a tu meñique una chance! - give meñique a chance! lo intentaré.
A mi adorado Maxwel Mastropiero. Mi vida no sería la misma sin él.
A mi adorado Maxwel Mastropiero. Mi vida no sería la misma sin él.
Sunday, October 02, 2005
Saturday, October 01, 2005
talkshow
willito por willito*
SY - No parás de robar...
Y - (risas) Eso es falso. En todo caso es un homenaje, o una cita. Además hace tiempo me dí cuenta de que me pasaba con Roland Barthes algo que con ningún otro escritor... Y me lo expliqué de esta forma: Todos los otros me conmovieron, a veces infinitamente, pero de él me enamoré. A sabiendas de que la persona detrás de sus textos no era quien yo había inventado, pero convencido de que era un invento fabuloso, me enamoré de él. Y en relación al supuesto plagio, no hay debate posible, no conmigo. A saber: el contexto es un atributo o una parte de las cosas que las hace ser lo que son, al mismo nivel que cualquiera de sus otras partes; cambiar el contexto genera una cosa nueva, completamente original y única. Descontextualizar no existe, no existen cosas sin contexto. Entonces ese ejercicio es la creación pura. Y si además el contexto incluye un factor temporal, básicamente todo es nuevo y original, todo el tiempo. Works for me. Es como ir por la vida con unas tijeras, recortando eso que parece pertinente y pegándolo en otro lugar, formas, palabras, gestos... Todo ya existía a priori, se trata de encontrar ese elemento que encaja perfecto en el momento justo. Y como se necesita de mucha sensibilidad y lucidez para encontrar la combinación exacta, o alguna que conmueva, me parece una empresa muy respetable. Y por eso ser curioso es más que una necesidad, es una obligación. La premisa más perversa sería creer que la ignorancia nos vuelve impunes. Es una fantasía, pero si todos nos pusiesemos de acuerdo en aceptar que todos sabemos todo, o que ya lo hemos visto todo, estaríamos obligados a dirigir la mirada a eso que por definición es original en las cosas: que estén ahí en este preciso instante, porque lo único que no habiamos visto nunca hasta ahora era este preciso instante. Entonces crear es sencillamente poner algo donde antes no estaba, y si esta nueva combinación dispara algún sentido poético, es la felicidad. Pienso esto porque a eso me dedico, mi trabajo es ser conciente de este fenómeno, porque inveto cosas que van a estar en el paisaje de otros, en muchos instantes, que me interesa que por lo valiosamente irrepetibles, sean un poco más simpáticos.
SY - Como un blog lleno de flores... que cursi.
Y - Soy terriblemente cursi, qué más puedo decir. Me acordé de algo: cuando era chico ví un episodio de esos "cuentos asombrosos" o "la dimensión desconocida", alguno del género, donde lo que pasaba era que inventaban un mundo donde unos señores de azul, todos azules, eran los encargados de armar las puestas en escena para los momentos de la gente común. Y el final era el momento en que ese nuevo escenario, era recorrido por la gente que se suponía que iba a pasar por ahí en ese momento, completamente inocentes de que todo había sido pueso allí por estos señores azules, y que como no todo siempre puede salir de acuerdo al plan, habían dejado olvidada una llaveajustatuercas, azul. Recuerdo la expresión en la cara de la persona, el ingenuo transeunte que pasa y la encuentra, y se me pone la piel de gallina. ¿Podía pasarle algo más poético a esa persona que encontrarse ese objeto, tal vez el primero en la lista de objetos poco poéticos, en ese momento y en ese lugar?
SY - Y yo entonces te tendría que preguntar ahora: ¿Qué estoy haciendo acá? Me aburrís.
Y- (risas) Te puse para repetir una dinámica que persigue. No sé como piensa el resto de la gente. Yo hablo. Todo el tiempo, en mi cabeza. En un largo monólogo que empezó desde que tengo memoria. Me invento interlocutores, desde ya. Muchas veces gente que conozco. Lucas se rie de mi, porque es muy común que vayamos caminando por la calle, en silencio, y yo de pronto haga un gesto con las manos. Porque él felizmente no me escucha, pero yo siempre le estoy hablando a alguien, y a veces cuando mi discurso alcanza su climax dramático hago el gesto que haría si estuviese hablando en voz alta. Cuando era más chico me atormentaba la certeza de que ese sutil pero preciso manejo de la retórica que alcanzaba cuando estaba solo (sic), nunca se repetía en mis diálogos con otros; siempre me quedaba por decir eso que era lo único que en realidad tenía que ser dicho. Cada vez me pasa menos, cada vez tengo menos trabas. Pero como sigo pensando de la misma forma, hablando, ahora me entretengo diciéndole a mi invitado de turno, las cosas más absurdas. Hoy te puse a vos.
SY - Sos muy estúpido.
Y - Matate.
*Mi libro preferido de Roland Barthes es "Roland Barthes por Roland Barthes"
SY - No parás de robar...
Y - (risas) Eso es falso. En todo caso es un homenaje, o una cita. Además hace tiempo me dí cuenta de que me pasaba con Roland Barthes algo que con ningún otro escritor... Y me lo expliqué de esta forma: Todos los otros me conmovieron, a veces infinitamente, pero de él me enamoré. A sabiendas de que la persona detrás de sus textos no era quien yo había inventado, pero convencido de que era un invento fabuloso, me enamoré de él. Y en relación al supuesto plagio, no hay debate posible, no conmigo. A saber: el contexto es un atributo o una parte de las cosas que las hace ser lo que son, al mismo nivel que cualquiera de sus otras partes; cambiar el contexto genera una cosa nueva, completamente original y única. Descontextualizar no existe, no existen cosas sin contexto. Entonces ese ejercicio es la creación pura. Y si además el contexto incluye un factor temporal, básicamente todo es nuevo y original, todo el tiempo. Works for me. Es como ir por la vida con unas tijeras, recortando eso que parece pertinente y pegándolo en otro lugar, formas, palabras, gestos... Todo ya existía a priori, se trata de encontrar ese elemento que encaja perfecto en el momento justo. Y como se necesita de mucha sensibilidad y lucidez para encontrar la combinación exacta, o alguna que conmueva, me parece una empresa muy respetable. Y por eso ser curioso es más que una necesidad, es una obligación. La premisa más perversa sería creer que la ignorancia nos vuelve impunes. Es una fantasía, pero si todos nos pusiesemos de acuerdo en aceptar que todos sabemos todo, o que ya lo hemos visto todo, estaríamos obligados a dirigir la mirada a eso que por definición es original en las cosas: que estén ahí en este preciso instante, porque lo único que no habiamos visto nunca hasta ahora era este preciso instante. Entonces crear es sencillamente poner algo donde antes no estaba, y si esta nueva combinación dispara algún sentido poético, es la felicidad. Pienso esto porque a eso me dedico, mi trabajo es ser conciente de este fenómeno, porque inveto cosas que van a estar en el paisaje de otros, en muchos instantes, que me interesa que por lo valiosamente irrepetibles, sean un poco más simpáticos.
SY - Como un blog lleno de flores... que cursi.
Y - Soy terriblemente cursi, qué más puedo decir. Me acordé de algo: cuando era chico ví un episodio de esos "cuentos asombrosos" o "la dimensión desconocida", alguno del género, donde lo que pasaba era que inventaban un mundo donde unos señores de azul, todos azules, eran los encargados de armar las puestas en escena para los momentos de la gente común. Y el final era el momento en que ese nuevo escenario, era recorrido por la gente que se suponía que iba a pasar por ahí en ese momento, completamente inocentes de que todo había sido pueso allí por estos señores azules, y que como no todo siempre puede salir de acuerdo al plan, habían dejado olvidada una llaveajustatuercas, azul. Recuerdo la expresión en la cara de la persona, el ingenuo transeunte que pasa y la encuentra, y se me pone la piel de gallina. ¿Podía pasarle algo más poético a esa persona que encontrarse ese objeto, tal vez el primero en la lista de objetos poco poéticos, en ese momento y en ese lugar?
SY - Y yo entonces te tendría que preguntar ahora: ¿Qué estoy haciendo acá? Me aburrís.
Y- (risas) Te puse para repetir una dinámica que persigue. No sé como piensa el resto de la gente. Yo hablo. Todo el tiempo, en mi cabeza. En un largo monólogo que empezó desde que tengo memoria. Me invento interlocutores, desde ya. Muchas veces gente que conozco. Lucas se rie de mi, porque es muy común que vayamos caminando por la calle, en silencio, y yo de pronto haga un gesto con las manos. Porque él felizmente no me escucha, pero yo siempre le estoy hablando a alguien, y a veces cuando mi discurso alcanza su climax dramático hago el gesto que haría si estuviese hablando en voz alta. Cuando era más chico me atormentaba la certeza de que ese sutil pero preciso manejo de la retórica que alcanzaba cuando estaba solo (sic), nunca se repetía en mis diálogos con otros; siempre me quedaba por decir eso que era lo único que en realidad tenía que ser dicho. Cada vez me pasa menos, cada vez tengo menos trabas. Pero como sigo pensando de la misma forma, hablando, ahora me entretengo diciéndole a mi invitado de turno, las cosas más absurdas. Hoy te puse a vos.
SY - Sos muy estúpido.
Y - Matate.
*Mi libro preferido de Roland Barthes es "Roland Barthes por Roland Barthes"
Tuesday, September 27, 2005
highest
No es que esté todo mal. L. está sencillamente sujeto a un proceso minucioso de observación y posterior diagnóstico. Así se lo dije, y así será. Si todo esto empezó el sábado pasado o hace tres años, es un detalle en el que prefiero no detenerme. Pero de vuelta, no está todo mal. Es básicamente lo de siempre. Rescato sí un momento, que aunque se supone áspero y peligroso, yo de verdad disfruto (ahora se me ocurre "perversamente", pero eso sería muy desubicado). Ese momento en el que se hace necesario "hablar" de lo que pasa (o se me hace necesario, de vuelta, un detalle menor). Muy pocas veces mi discurso alcanza niveles tan altos de precisión y compromiso como en esos momentos. Es como si hubiese nacido para eso. Y lo mejor es que invariablemente termino siempre reconciliado conmigo, incluso con toda mi neurosis, que lamentablemente no puedo dejar de encontrar entrañable (y casi pintoresca). El gran hallazgo esta vez fue la aparición (mágicamente fortuita) de una metáfora que lo decía todo (o me decía todo): la identificación en mí de territorios de inseguridad (creo haber dicho inmadurez, pero este es mi blop, y puedo tomarme todas las licencias que quiera). El paisaje era de pronto muy claro, muy inofensivo. Existen en mí territorios de inseguridad muy definidos, con límites casi tangibles. Porque... todo no se puede. El recorrido que ha sido mi vida hasta el momento me obligó a tener que atrincherarme en determinados territorios, que felizmente (tercamente) pude construir, creo, muy sólidos. Son los que me hacen "una gran persona". Pero están los otros, claramente pantanosos, que me hacen alguien encantador (o insoportable...). Son como arenas movedizas, y por definición, una vez que ese es el paisaje, me hundo. Y es un proceso que me lastima. Y no puedo ir más que hasta el fondo (como diría Pizarnik). Cuando confiás en alguien le dás ese privilegio: esa persona puede deliberadamente empujarte a tus pantanos. Ese es el riesgo. Supongo que por eso, la confianza es la mayor de todas las entregas. No hay nada tan absolutamente valioso como la confianza. Por eso se me hace tan necesario llevar siempre conmigo un mapa lo más actualizado posible de mis territorios emocionales (neuróticos). Porque si tomo por el camino equivocado, me hundo. El problema es que aunque tenga un registro bastante detallado de la geografía de mi neurosis, es casi imposible hacer pronósticos. Sería genial poder sintonizar un weatherchannel emocional, con un locutor que te advierta que se acerca el huracán, con imágenes satelitales y todo (y con toda una iconografía diseñada por mi).
Le dije a L que tengo la solución perfecta para todos mis males: cuando no está conmigo, tiene que perder por entero su sexualidad, como una plantita, sensible sólo a fenómenos inofensivos, aint that be great?! La neurosis en su punto más alto, y L me mira (o se rie, whatever). Pero en serio, no sería grandioso que su sexualidad se activase mediante un interruptor sólo conocido por mi?
Todo este delirio se explica de la siguiente forma: todo (todo) lo que me pasa, yo lo proyecto en L. O sea, si voy caminando por la calle, y me cruzo con algún muchachete y pienso "te parto", una porción de mi cerebro está anotando que L, en ese preciso instante, se cruzó con un muchachete y le miró el orto (perdón). ¿Es tan desacabellado? A mi me parece lógico. Y me atormenta. Y también me doy mucha ternura. Porque básicamente me empujo yo solito a mis pantanos. Y la más sólida de mis construcciones es el trampolín que inventé para eso. Y soy un clavadista profesional, con un dominio de la técnica sublime.
Le dije a L que tengo la solución perfecta para todos mis males: cuando no está conmigo, tiene que perder por entero su sexualidad, como una plantita, sensible sólo a fenómenos inofensivos, aint that be great?! La neurosis en su punto más alto, y L me mira (o se rie, whatever). Pero en serio, no sería grandioso que su sexualidad se activase mediante un interruptor sólo conocido por mi?
Todo este delirio se explica de la siguiente forma: todo (todo) lo que me pasa, yo lo proyecto en L. O sea, si voy caminando por la calle, y me cruzo con algún muchachete y pienso "te parto", una porción de mi cerebro está anotando que L, en ese preciso instante, se cruzó con un muchachete y le miró el orto (perdón). ¿Es tan desacabellado? A mi me parece lógico. Y me atormenta. Y también me doy mucha ternura. Porque básicamente me empujo yo solito a mis pantanos. Y la más sólida de mis construcciones es el trampolín que inventé para eso. Y soy un clavadista profesional, con un dominio de la técnica sublime.
Saturday, September 24, 2005
altitud 4000 mts.
Me quedan por ordenar todos mis libros y papeles. El punto es que en el proceso, me encuentro con todas esas pequeñas cosas que me obligan a detenerme y me traen recuerdos y me conmuevo y cuando me doy cuenta hace media hora que sostengo el mismo papelito y mi gata ya desordenó la pila de nuevo y se llevó la mitad de las fotos abajo de la cama. Es que de tener un hobbie, sería ese, juntar fotos viejas, o notas, o postales, de mi familia y no. Y tengo muchísimas. Como toda una serie de postales "recuerdo de Mar Chiquita", que es fantástica. Y del montón, elijo una para escanear y postear que me hizo descostillar de la risa. Una postal que mi abuela les mandó a mi viejo y mi abuelo desde Mendoza...

Mendoza, 10 de abril 1965
Queridos J.C. y G.:
Anoche llegamos muy bién, luego de un viaje corto aunque muy movido. C. vomitó 2 veces en la bolsa del avión, suerte que no había almorzado. Mendoza es preciosa. El hotel es sumamente cómodo y pulcrísimo. En el baño tenemos un calefón igual al nuestro. Mi habitación tiene un gran balcón sobre la Av. San Martín. Los G. están muy bién y tienen un departamento muy lindo y bién arreglado. P. duerme allí. A C. le encantó el cuadro. Lo puso en la cabecera del sillón de su despacho debajo del cristo. Lo tiene muy bien amueblado. Besos Porota.
Y hablando de aviones, mi nueva compañera de trabajo, que ya cité alguna vez, nos dijo a todos algo que no sólo la explica a ella por entero (ella es todo glamour), sino que perfectamente podría formar parte del pequeño manual de bolsillo de estilo y sensibilidad para amateurs que está por escribirse.
A saber...
Cuando era chica, mi mamá me dijo: No te voy a decir que no te emborraches, yo sé que aunque te lo diga lo vas a hacer igual. Lo único que te pido, es que no sea con vino barato.

Mendoza, 10 de abril 1965
Queridos J.C. y G.:
Anoche llegamos muy bién, luego de un viaje corto aunque muy movido. C. vomitó 2 veces en la bolsa del avión, suerte que no había almorzado. Mendoza es preciosa. El hotel es sumamente cómodo y pulcrísimo. En el baño tenemos un calefón igual al nuestro. Mi habitación tiene un gran balcón sobre la Av. San Martín. Los G. están muy bién y tienen un departamento muy lindo y bién arreglado. P. duerme allí. A C. le encantó el cuadro. Lo puso en la cabecera del sillón de su despacho debajo del cristo. Lo tiene muy bien amueblado. Besos Porota.
Y hablando de aviones, mi nueva compañera de trabajo, que ya cité alguna vez, nos dijo a todos algo que no sólo la explica a ella por entero (ella es todo glamour), sino que perfectamente podría formar parte del pequeño manual de bolsillo de estilo y sensibilidad para amateurs que está por escribirse.
A saber...
Cuando era chica, mi mamá me dijo: No te voy a decir que no te emborraches, yo sé que aunque te lo diga lo vas a hacer igual. Lo único que te pido, es que no sea con vino barato.
Thursday, September 22, 2005
hippie
Un florismo. Me pasé todo el invierno trabajando para el verano que se acerca, y cuando por fin da sus primeras señales, tengo que empezar a trabajar para el próximo invierno. Así que estoy decidido a disfrutar la primavera tanto como pueda. El hippismo en las manos equivocadas puede generar monstruos repudiables, pero en estado puro... tal vez...

Y la banda de sonido perfecta para días como hoy (almorzar en la plaza, chicos lindos tomando sol, pajaritos) sería:
architecture in helsinki - fumble
architecture in helsinki - the owls go
Gentilmente convidados por Juania.
Y aprovecho para saludar primaveralmente a Petit, que hace unos días posteó entre otros un tema hermoso de Architecture.

Y la banda de sonido perfecta para días como hoy (almorzar en la plaza, chicos lindos tomando sol, pajaritos) sería:
architecture in helsinki - fumble
architecture in helsinki - the owls go
Gentilmente convidados por Juania.
Y aprovecho para saludar primaveralmente a Petit, que hace unos días posteó entre otros un tema hermoso de Architecture.
Monday, September 19, 2005
plantismo
Lucas: voy a hacer berenjenas en escabeche.
Yo: sí, me imaginé (desde acá veo la receta en un archivo txt en su compu, no voy a hacer preguntas, es algo entre él y su madre)
Lucas: ¿Las hago con o sin cáscara?
Yo: sin (ya aprendí, algo tengo que contestar, aunque no tenga la menor idea, de lo contrario podría empezar un diálogo sin final)
El punto es que ya me mudé. Donde sea que esté mi compu conectada a internet, está mi hogar (y mis libros, mi gata, mi ropa y bueno, Lucas, por qué no decirlo).
Lo más crítico de todo fue descubrir que (y es algo que me afectó sobremanera) en mi nuevo balcón, desde el que tengo una vista privilegiada de todo Palermo, o de una parte considerable, nunca da el sol excepto durante media hora al atardecer. Durísimo. La mayoría de las plantas que tenemos con L son de exterior, y son muchas, y como mi pensamiento está lleno de una busqueda ridícula de señales en los fenómenos más absurdos (patología esta de la que afortunadamente L carece por completo), nuestras plantas siempre fueron una metáfora silenciosa pero elocuente del devenir de nuestra relación. Así que la perspectiva de presenciar una catástrofe botánica de estas dimensiones, verdaderamente me afectó. Lucas, por otro lado, y desde un lugar completamente otro (por orgullo) también parecía estar bastante afectado por este desastre doméstico. Y le dije, después de confirmar que por cuestiones ajenas a nosotros (o no, el dpto lo elegí yo, y admito que nunca se me ocurrió pensar si la orientación nos era favorable), que ibamos a tener en nuestra casa el realityshow de la tristeza. Ibamos a ver marchitarse una a una nuestras plantas, sin mucho para hacer al respecto. Lucas se puso serio, y me djo: no va a pasar eso, les voy a dar hormonas a morir. Grandioso. Está de más decir que Lucas jamás usaría la expresión "a morir", eso lo agregué yo para que se entienda mejor el nivel de compromiso.
Lucas (y ya que estamos lo digo, si claramente este es el blop no oficial de Lucas y su atormentada vida conmigo) nunca exagera. No existen para él expresiones como "fantástico" o "fabuloso", sobre las cuales yo casi construyo todo mi discurso, sin jamás quedarme tranquilo de que consigo explicar mis niveles de entusiasmo, las más de las veces adolescente, sobre las cosas más estúpidas. En una de nuestras primeras salidas, hablando de no sé que obra de teatro de Veronese que a mi (obvio) me había "fascinado", él se limitó a decir sobre la obra en cuestión, que era "simpática". Yo pensé ouch, no nos entendemos, sin sospechar que "simpático" lidera lejos su repertorio de cumplidos. Y así todo. Seinfield es "genial" para mí (estamos alquilando todos los episodios en dvd), y para él Seinfield "está bien", "si querés lo llevamos". Ok. O a veces tiene lapsus como preguntarme: ¿cómo se les dice a los recolectores de papeles?, y yo: ¿cartoneros?
Esa es la clave. Si nuestra relación funciona, es porque tenemos concepciones generales del mundo casi completa y absolutamente opuestas. Por eso casi no podemos discutir, sencillamente porque nunca nos entenderíamos. Y los dos lo sabemos. Y podemos vivir con eso. Si yo me "angustio", Lucas se queda mirándome como frente a un fenómeno completamente curioso y absurdo. Desde ya L "no entiende" terapia. A veces creo que para L soy como un experimento, que trata de encontrar en mi patrones de comportamiento coherentes, sin éxito. Y L es mi experimento también. Algún día se va a cansar y me va a matar. Hoy no se me ocurre otro final para nuestra relación. Yo sé que L es un asesino serial reprimido, y cuando finalmente lo asuma, y salga a matar personas, va a ser muy muy feliz. Mientras tanto se va a divertir drogando a nuestras plantas.
Si tuviese espíritu, buscaría El Diario De Adán Y Eva, de Mark Twain, y copiaría acá el final, el último monólogo de Eva. Creo que ahí se explica muy bien lo que me pasa con L. Lo voy a googlear, pero las traducciones que se encuentran online son siempre odiosas.
Yo: sí, me imaginé (desde acá veo la receta en un archivo txt en su compu, no voy a hacer preguntas, es algo entre él y su madre)
Lucas: ¿Las hago con o sin cáscara?
Yo: sin (ya aprendí, algo tengo que contestar, aunque no tenga la menor idea, de lo contrario podría empezar un diálogo sin final)
El punto es que ya me mudé. Donde sea que esté mi compu conectada a internet, está mi hogar (y mis libros, mi gata, mi ropa y bueno, Lucas, por qué no decirlo).
Lo más crítico de todo fue descubrir que (y es algo que me afectó sobremanera) en mi nuevo balcón, desde el que tengo una vista privilegiada de todo Palermo, o de una parte considerable, nunca da el sol excepto durante media hora al atardecer. Durísimo. La mayoría de las plantas que tenemos con L son de exterior, y son muchas, y como mi pensamiento está lleno de una busqueda ridícula de señales en los fenómenos más absurdos (patología esta de la que afortunadamente L carece por completo), nuestras plantas siempre fueron una metáfora silenciosa pero elocuente del devenir de nuestra relación. Así que la perspectiva de presenciar una catástrofe botánica de estas dimensiones, verdaderamente me afectó. Lucas, por otro lado, y desde un lugar completamente otro (por orgullo) también parecía estar bastante afectado por este desastre doméstico. Y le dije, después de confirmar que por cuestiones ajenas a nosotros (o no, el dpto lo elegí yo, y admito que nunca se me ocurrió pensar si la orientación nos era favorable), que ibamos a tener en nuestra casa el realityshow de la tristeza. Ibamos a ver marchitarse una a una nuestras plantas, sin mucho para hacer al respecto. Lucas se puso serio, y me djo: no va a pasar eso, les voy a dar hormonas a morir. Grandioso. Está de más decir que Lucas jamás usaría la expresión "a morir", eso lo agregué yo para que se entienda mejor el nivel de compromiso.
Lucas (y ya que estamos lo digo, si claramente este es el blop no oficial de Lucas y su atormentada vida conmigo) nunca exagera. No existen para él expresiones como "fantástico" o "fabuloso", sobre las cuales yo casi construyo todo mi discurso, sin jamás quedarme tranquilo de que consigo explicar mis niveles de entusiasmo, las más de las veces adolescente, sobre las cosas más estúpidas. En una de nuestras primeras salidas, hablando de no sé que obra de teatro de Veronese que a mi (obvio) me había "fascinado", él se limitó a decir sobre la obra en cuestión, que era "simpática". Yo pensé ouch, no nos entendemos, sin sospechar que "simpático" lidera lejos su repertorio de cumplidos. Y así todo. Seinfield es "genial" para mí (estamos alquilando todos los episodios en dvd), y para él Seinfield "está bien", "si querés lo llevamos". Ok. O a veces tiene lapsus como preguntarme: ¿cómo se les dice a los recolectores de papeles?, y yo: ¿cartoneros?
Esa es la clave. Si nuestra relación funciona, es porque tenemos concepciones generales del mundo casi completa y absolutamente opuestas. Por eso casi no podemos discutir, sencillamente porque nunca nos entenderíamos. Y los dos lo sabemos. Y podemos vivir con eso. Si yo me "angustio", Lucas se queda mirándome como frente a un fenómeno completamente curioso y absurdo. Desde ya L "no entiende" terapia. A veces creo que para L soy como un experimento, que trata de encontrar en mi patrones de comportamiento coherentes, sin éxito. Y L es mi experimento también. Algún día se va a cansar y me va a matar. Hoy no se me ocurre otro final para nuestra relación. Yo sé que L es un asesino serial reprimido, y cuando finalmente lo asuma, y salga a matar personas, va a ser muy muy feliz. Mientras tanto se va a divertir drogando a nuestras plantas.
Si tuviese espíritu, buscaría El Diario De Adán Y Eva, de Mark Twain, y copiaría acá el final, el último monólogo de Eva. Creo que ahí se explica muy bien lo que me pasa con L. Lo voy a googlear, pero las traducciones que se encuentran online son siempre odiosas.
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